Dimite el presidente del mayor banco suizo, arrastrado por inversiones de alto riesgo

Mathis Cabiallavetta, de 53 años, presidente del consejo de administración de la Unión de Bancos Suizos (UBS), la mayor entidad financiera del país y una de las mayores del mundo, presentó ayer su dimisión por las enormes pérdidas del banco en inversiones de alto riesgo.En septiembre pasado se descubrió que UBS había invertido 92.000 millones de pesetas en un fondo de alto riesgo, el Long Term Capital Management (LTCM) de Estados Unidos, que está al borde de la quiebra. Una tercera parte de la inversión se ha perdido. Debido a estas pérdidas, la Bolsa de Zúrich registró importantes bajas en los últimos días, que el jueves llegaron a casi el 5%, principalmente por ventas en el sector bancario y particularmente UBS. Una carta difundida ayer por LTCM y dirigida a sus inversores reconoce que el fondo se ha depreciado un 44% durante el mes de septiembre y un 52% en lo que va de año. Sin embargo, asegura que su capital es el equivalente a 325.000 millones de pesetas y que, por ello, el fondo tiene la suficiente liquidez como para asumir sus posiciones de riesgo.

Otros tres importantes ejecutivos de la entidad suiza, el jefe de operaciones de riesgo, Felix Fischer; el jefe adjunto de operaciones, Werner Bonadurer, y el jefe del departamento de tipos de interés, Andrew Siciliano, abandonarán el banco "de común acuerdo" con la entidad.

Un comunicado de UBS informó que los cambios en la cúpula de la entidad se deben a "incapacidad" en la gestión de inversiones de alto riesgo aunque no se ha descubierto ningún caso de "grave negligencia".

Marcel Ospel, director general del banco, dijo que la capacidad estructural de la entidad no está amenazada, aunque a partir de ahora UBS concentrará su actividad en operaciones de menor riesgo.

Cabiallavetta, que durante 25 años escaló paso a paso la jerarquía de UBS hasta llegar a la presidencia, tras la fusión con la Sociedad de Bancos Suizos (SBS), en marzo de 1996, siempre defendió las inversiones de alto riesgo en productos derivados y fondos especializados. En 1993 declaró a la prensa que la hipersensibilidad del público a los riesgos que representan los productos derivados es exagerada y anunció una expansión de la actividad del banco en este sector.

Ya en 1997 la Unión de Bancos Suizos, producto de la fusión de la entidad del mismo nombre y SBS, perdió más de 60.000 millones de pesetas en inversiones especulativas de alto riesgo.