Olano: "Sólo temo a Jalabert"
Zintchenko repite triunfo en la víspera de una dura etapa montañosa
Abraham Olano, el líder de la Vuelta, fue gráfico ante el último obstáculo serio que se le presenta hoy en el regreso a la montaña. "Sólo temo a Jalabert. Es el que tiene más posibilidades de sorprenderme. No tengo miedo al Kelme ni al Festina", señaló ayer en la meta de Soria.La Laguna Negra de Neira aparece como la última oportunidad de alterar el orden establecido en la carrera. Quedará Navacerrada, en la víspera de la contrarreloj de Fuenlabrada -el terreno por excelencia de Olano- un escenario sujeto al libreto de la jornada de hoy. Olano y el Banesto se aprestan a defender su liderato ante el acoso principal de escaladores natos como Escartín, Heras y Virenque o Zülle.
No parece que el Kelme y el Festina, sin embargo, sean las ruedas a seguir por Olano. La estrategia de estos equipos pasa por jugar de lejos, en las rampas de los primeros puertos, especialmente, en el puerto de Santa Inés, situado a mitad del corto recorrido de la etapa (144 kilómetros). Desbancar a Olano del escalón más alto del podio pasa por aislar al guipuzcoano del resto de su equipo. Ahí podrían hacer daño al líder.
El Banesto saldrá a amarrar, aunque asume que Olano podría perder el liderato en el alto de la Laguna, pero no en manos de Escartín. Tiene la baza de Jiménez, el rey de la montaña y encargado del marcaje de los principales escaladores. La estrategia del Banesto es clara: salir con el freno de mano, cautela sobre los movimientos de los favoritos y, si es preciso, atacar. Es el terreno del Chaba.
La principal preocupación está a 35 segundos de Olano. Jalabert está haciendo su carrera. Arrañó segundos en las bonificaciones durante la primera semana y en la siguiente ha estado a la expectativa, atacando para volver a restar algún que otro segundo más. Todo indica que el campeón francés seguirá con el mismo planteamiento hoy, vigilando con su rostro de felino. Incluso, Olano advierte que podría ser el vencedor de la etapa y aumentar tiempo respecto a Escartín. "Tiene un cambio de ritmo fuerte y al mismo Escartín le costaría aguantarle".
Olano teme a Jalabert pero Álvaro Pino, director del Kelme, advierte: "Habrá más diferencias de las que podamos pensar".
Y mientras se prepara la jornada estrella, en el prólogo de ayer el ruso Zintchenko repitió en Soria, su residencia habitual, la victoria que consiguió en Sabiñánigo. El Vitalicio echa mano de los rusos.
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