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Una niña china muere carbonizada en un piso habitado por 20 inmigrantes

F. Javier Barroso

Las llamas se cebaron ayer en un hacinado piso del distrito Centro. Los 20 vecinos de origen chino que vivían en el primer piso del número 85 de la calle de Mesón de Paredes se despertaron con el humo de un incendio que se inició por causas todavía no aclaradas. Una niña de tres años, Ana Li, murió calcinada, y su hermano, de dos, cuyo nombre no fue facilitado ayer, presenta gravísimas heridas. Otras cuatro personas resultaron levemente intoxicadas por el humo.El incendio comenzó sobre las diez de la mañana en la habitación donde dormían los niños, que se encontraban solos. La menor murió calcinada en el acto, mientras que su hermano sufrió quemaduras de segundo y tercer grado en el 80% de su cuerpo. Las primeras hipótesis apuntan, según la policía, a que se produjera un cortocircuito o a que los niños manipularan algún infiernillo.

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Las llamas se propagaron rápidamente. En el piso se hacinaban 20 inmigrantes chinos en tres habitaciones, cada una de ellas, una pequeña vivienda. Todo el suelo estaba repleto de colchones; las ropas de los moradores estaban apiladas junto a las pequeñas cocinas y enseres domésticos que poseía cada familia, según informaron fuentes municipales.

Un hombre joven, Jorge, de 28 años, que pasaba por la zona, al ver cómo lloraba el niño herido en el balcón de la vivienda, subió hasta el primer piso por las verjas de una farmacia cerrada.

El transeúnte cogió al pequeño, vestido con un quimono, y se lo echó a tres personas que permanecían en la calle. "Iba con mi hermano en el coche, vi el incendio y al niño en el balcón. Le dije que parara y directamente subí", señaló el joven a Europa Press.

En su hazaña sufrió quemaduras leves en una mano y se chamuscó el pelo y la camiseta.

Los otros habitantes del piso abandonaron el inmueble y a los niños a la carrera

En el siniestro, resultaron intoxicados por el humo otros tres inmigrantes chinos. Dos menores, de 14 y 16 años, fueron trasladadas por el Samur a la clínica de La Concepción. Fueron dados de alta al comprobar que su estado no revestía gravedad. Una mujer de 39 años fue atendida por el Samur en el lugar y dada de alta a los pocos minutos. Un vecino de 80 años, que vive en el tercer piso, sufrió una crisis nerviosa. Fue realojado en una residencia de la calle de General Ricardos. Era el único afectado de origen español.El juez de guardia, Ángel Luis Ramos Muñoz, sustituto del juzgado número 44 de Plaza de Castilla, ordenó el levantamiento del cadáver de Ana Li, al mediodía. El cuerpo fue trasladado a las 15.00 al Instituto Anatómico Forense, donde hoy está previsto que se le practique la autopsia.

Las llamas del incendio también afectaron al segundo piso (el edificio, en buen estado, tiene tres y dos viviendas por planta), habitado por ciudadanos vietnamitas. Uno de los moradores de la casa, Tan Triupam, vio al niño en el balcón nada más iniciarse las llamas. El humo manchó toda la fachada y el interior de su piso. "Yo conocía a todos los que vivían ahí porque les veía cada vez que entraba o salía. La verdad, no manteníamos mucha relación. Ellos llevan viviendo aquí más tiempo que nosotros", explicó Triupam.

Vecinos de la zona explicaron que las familias del piso siniestrado llevaban en la zona varios años. No supieron precisar la fecha exacta de llegada. Les veían por el barrio cuando entraban o salían del piso y no acostumbraban a hacer vida social. Los más conocidos por los lugareños eran los niños porque jugaban en la calle. Hace unos tres años hubo un conato de incendio en el mismo lugar.

El suceso podría haber tenido aún peores consecuencias si hubiera explosionado por el calor una bombona de butano que había en el balcón de la casa incendiada.

Por otra parte, dos niños de tres y 12 años y una mujer resultaron intoxicados en un incendio que se produjo en el número 4 de la calle de Alonso Cano (Chamberí) a las 17.00 horas. El menor fue trasladado al hospital Clínico para comprobar su estado. Era asmático y había inhalado humo. Las otras dos personas fueron dadas de alta.

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Sobre la firma

F. Javier Barroso
Es redactor de la sección de Madrid de EL PAÍS, a la que llegó en 1994. También ha colaborado en la SER y en Onda Madrid. Ha sido tertuliano en TVE, Telemadrid y Cuatro, entre otros medios. Licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, está especializado en Sucesos y Tribunales. Además, es abogado y criminólogo.

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