La Guardia Civil intercepta 221.000 relojes de contrabando

Cinco personas han sido detenidas en Barcelona por introducir en el país relojes falsos de marcas muy caras procedentes de China por valor de 3.000 millones de pesetas y distribuirlos en tiendas y mercadillos de Barcelona, Valencia y la costa de Andalucía, según ha informado la Guardia Civil. Según la documentación incautada, tres detenidos de origen paquistaní e indio habrían introducido en España 221.500 relojes y 9.000 punteros láser, de los cuales la Guardia Civil ha logrado recuperar 83.500 relojes y 5.360 punteros. Esta partida de relojes demuestra, según el comandante Francisco Barreiro, "un espectacular incremento en el comercio ilegal de relojes falsos". El año pasado, en toda España se intervinieron 5.000 relojes. Los otros dos implicados en este caso son de origen argelino y fueron detenidos en una operación anterior, en la que se incautaron 5.103 relojes. Toda la mercancía era introducida por el aeropuerto de El Prat, pero con métodos diferentes. Los paquistaníes e indios utilizaban una documentación que no correspondía con el contenido real de los cargamentos o llenaban la parte de arriba de las cajas con relojes sin marca y escondían en el fondo los falsificados. Los argelinos dejaban el material abandonado en el aeropuerto durante varios días y después lo iban a buscar como si fueran objetos perdidos para evitar el control de la aduana. A los detenidos se les imputa dos delitos, uno de contrabando y otro contra la propiedad industrial. La red de contrabando fue descubierta por la Oficina de Análisis e Investigación Fiscal de la Guardia Civil, que opera en todos los puertos y aeropuertos.