A la búsqueda de Rose

Atrapada desde el pasado viernes entre los escombros, Rose Wanjiku se ha convertido en el símbolo de las frágiles esperanzas de los equipos de rescate que luchan aún para hallar a posibles supervivientes del atentado contra la Embajada norteamericana en Nairobi. Una de las personas rescatada el sábado aseguró que Rose, una empleada de banca, se encontraba con vida en lo que fue el segundo piso del edificio Gateway House, destruido por la explosión.El teniente coronel Ofer Lefler, portavoz de los 140 socorristas israelíes desplazados a Kenia, aseguró ayer que su lema es que "siempre se mantiene la esperanza". Rose, que sufre quemaduras en la cara, ha logrado establecer contacto con ellos en varias ocasiones y los perros adiestrados en la localización de supervivientes marcaron el lunes dos zonas de búsqueda entre los cascotes.

Los equipos israelíes y kenianos, apoyados por socorristas franceses y norteamericanos, proseguían ayer los trabajos de desescombro para intentar alcanzar la planta baja del edificio, cuyos muros siguen en pie y donde se encontraba el banco en el que trabajaba Rose. "La esperanza se apaga, pero nadie quiere abandonar", advertía John Sparrow, portavoz de Cruz Roja.