El Defensor investiga la muerte de 38 marroquíes

El Defensor del Pueblo, Fernando Álvarez de Miranda, ha abierto una investigación para aclarar la intervención del Gobierno español en relación con la muerte de un grupo de 38 inmigrantes en aguas marroquíes próximas a Melilla, tras el hundimiento de una patera a finales de junio.Álvarez de Miranda envió el pasado jueves un escrito a la Delegación del Gobierno de Melilla en el que pide información sobre las circunstancias en que se produjeron los hechos y para saber "las gestiones que realizó ante las autoridades marroquíes en relación a la posible colaboración en el rescate de los supervivientes y la posterior recuperación de los cadáveres".

El delegado del Gobierno, Enrique Beamud, aseguró la semana pasada que conoció lo ocurrido por una llamada del gobernador de Nador, el pasado 5 de julio, cuando le solicitó el envío de bolsas-sudario para recoger los cadáveres.

La Gendarmería marroquí detuvo el pasado sábado a H.L.M., de 26 años, un ciudadano español residente en Melilla, que podría estar relacionado con una red ilegal de tráfico de inmigrantes vinculada con el hundimiento de esa patera.

Las investigaciones se iniciaron tras las declaraciones del único superviviente de la catástrofe, Hamed Oulí, que explicó cómo había embarcado en la patera tras pagar unas 150.000 pesetas. La detención se produjo cuando H.L.M. intentaba entrar en Marruecos por la frontera de Benni-Enzar, lugar en el que fue detenido.

Las autoridades marroquíes detuvieron hace unas semanas en relación con este asunto a cuatro personas por pertenecer a una red de tráfico ilegal de inmigrantes, pero aún restaban otras dos residentes en Melilla. A raíz de estas informaciones, la Policía Nacional decidió abrir una investigación para localizar a una tercera persona implicada en esta red.