El Ayuntamiento de Xàbia opta por recoger la basura ante la huelga

Xàbia sufre una huelga de basuras desde el pasado viernres que puede tener consecuencias negativas para su imagen turística. Las desavenencias salariales que la plantilla mantiene con FCC, empresa concesionaria del servicio de recogida de residuos sólidos urbanos y limpieza viaria, han desencadenado una protesta que, según diversos informes sanitarios, ya ha dado lugar a la aparición de focos de infección, en los lugares donde se ha producido una gran acumulación de basuras. De ahí que el Ayuntamiento haya apelado al derecho a garantizar la salud pública, que prevalece sobre el derecho que tienen los trabajadores a la huelga. CC OO ha denunciado al consistorio por boicotear el paro. El Ayuntamiento de Xàbia ha decidido recoger la basura en las zonas del municipio que, según los informes sanitarios, puedan convertirse en focos de infección. El problema de la acumulación de residuos, que ha acarreado la huelga indefinida que los trabajadores de FCC iniciaron el viernes, ha provocado, y así lo determinaban los informes sanitarios que trascendieron en el pleno del lunes, la aparición de roedores y plagas de insectos, así como fuertes olores que se han focalizado, sobre todo, en los lugares donde hay negocios de hostelería. Por todo ello, la Corporación ha refrendado un decreto de alcaldía que faculta a la brigada municipal a actuar en los punto donde la proliferación de residuos entraña un riesgo manifiesto de infecciones. Según el mismo decreto, esa recogida no supone conculcar el derecho a la huelga de los trabajadores. Denuncia de CC OO Con todo, el sindicato CC OO presentó el lunes en la fiscalía, la subdelegación de gobierno e inspección de trabajo una denuncia contra el Ayuntamiento por conculcar el derecho de los trabajadores de FCC a la huelga. Fuentes del sindicato aseguraron que el consistorio organizó un servicio de recogida de emergencia, para el que contrató a una empresa privada y utilizó vehículos municipales. CC OO afirma que, de este modo, se boicotea la protesta y se vulnera un derecho que es constitucional. Mientras tanto, FCC continúa sin dar su brazo a torcer en el conflicto salarial que le enfrenta a sus trabajadores. La presión que el ayuntamiento ha ejercido sobre la empresa para lograr la desconvocatoria del paro tampoco ha logrado variar ni un ápice una postura que CC OO tilda de "intransigente". Y eso que el Ayuntamiento ha llegado a conminarla con tomar las medidas legales que estén a su alcance para obligarla a cumplir el contrato. Aunque el domingo empezó a atisbarse la posibilidad de un acuerdo, el Ayuntamiento lo rechazó porque le comprometía a costear la subida salarial de los trabajadores e inyectar dinero para corregir el desequilibrio económico que la empresa dice tener. "FCC no puede desviar sus responsabilidades, culpar al Ayuntamiento, ni pretender una alteración del precio del contrato a tan solo un año desde que se adjudicó el servicio", señalaba un comunicado firmado por el alcalde, Juan Moragues.