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El PSOE avisa que apelará al voto útil porque la proximidad de IU es sólo una "argucia electoral"

"Que nadie se llame a engaño, haremos un llamamiento al voto útil de la izquierda". El secretario de Organización de los socialista andaluces, Luis Pizarro, se mostró así de explícito al anunciar que su partido ya funciona en clave electoral para la próxima cita en las urnas de las municipales de 1999, y que su intención es ir a por todas. "Nuestro adversario es la derecha, aunque apelamos a la mayoría de progreso para que no pase como en las elecciones pasadas, que IU consiguió muchas concejalías, y los votos de izquierda sumaban más, pero está gobernando el PP".

Pizarro, que se reunió con los secretarios de Organización de las ocho provincias para diseñar la campaña, explicó que la tesis que maneja el PSOE es que las reiteradas llamadas de IU al diálogo con los socialistas es una cuestión táctica para frenar la sangría de votos que señalan las encuestas por su frecuente coincidencia con los postulados del PP. "Aparentemente, existe un cambio de discurso, pero no vemos un cambio de actitud", señaló el socialista, quien, sin embargo, quiso dejar claro que para el PSOE la federación no es un enemigo electoral. "Respetamos el papel de IU, sabemos que tiene una base de apoyo y que si no la amplía es precisamente porque no ha actuado correctamente: el peor enemigo de IU, está en IU, no en otro partido". Luis Pizarro se refirió a los comicios autonómicos de 1994, en los que, a su juicio, Izquierda Unida, lejos de condicionar la política del PSOE, "lo que hizo fue poner al PP a gobernar en Madrid y en las capitales de provincia de Andalucía". Según el secretario de Organización del PSOE andaluz, resulta poco creíble que una fuerza política quiera negociar con otra cuando se están poniendo continuamente condiciones: "Todos los días nos ponen una, primero que teníamos que romper la coalición de Gobierno con el PA, luego que descartar la candidatura de José Barrionuevo para la alcaldía de Almería, y el domingo, que, para sentarnos antes tiene Manuel Chaves que destituir a unos cuantos consejeros; es evidente que no tienen voluntad de diálogo". Luis Pizarro añadió que los socialistas son conscientes de que parten de una situación difícil, pero el momento político es muy distinto al de 1995, "cuando no había cuerpo que la aguantara". Según el secretario de Organización, el resto de los partidos ha estado al borde de un "suicidio colectivo" cuando ha visto las encuestas, aunque prefirió centrarse en las condiciones reales de la actualidad. Pizarro apuntó que en la primera reunión con los secretarios provinciales se han apuntado cuatro puntos a favor de su partido. Dos de ellos son la mayor credibilidad de los socialistas y la cohesión interna: "Somos percibidos como una fuerza útil, con ideas y proyectos, y, además, unidos, pese a la tensión de las primarias; a la gente no le gusta que los partidos empleen sus energías en pelearse y lo castigan en las urnas". Las otras dos bazas, en opinión de Pizarro, son el efecto positivo de las primarias y "las torpezas del PP". El socialista dijo que en los sondeos se señala que al menos un 15% de los electores del PP están con las posiciones de la Junta frente a la política en la comunidad del Gobierno central.

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