'Carmen' llega al Alfil en plan "de coña" y con sólo tres actores

La Carmen que se presenta hoy en el teatro Alfil es "totalmente de coña". Lo dice Gustavo Tambascio, un director de escena con muchísima experiencia en la dirección de óperas y responsable de esta nueva versión de la obra de Bizet basada en la novela de Merimée. En esta ocasión, el escritor francés está disgustado con el autor de la famosa partitura musical porque ha dulcificado su historia: él había escrito una novela en la que los dos protagonistas, Carmen y don José, eran dos figuras terroríficas.

Por eso, durante toda la representación Merimée tratará de llevar el espectáculo a su terreno. Es decir, que tratará de convertir a Carmen y don José en auténticos asesinos.Pero el verdadero mérito de esta puesta en escena radica en que todos los personajes de la obra recaen en únicamente tres cantantes: una oronda mujer, un hombre de pequeñísima estatura y un cantante normal y corriente. Son Trinidad Iglesias, Emilio Gavira y Juan Carlos Martín.

Es Gavira el que más personajes encarna. Lo mismo aparece en escena vestido de torero que con faldas en plan cigarrera. "Pero cada vez que sale le matamos", comenta Martín. El vestuario que saca Trinidad Iglesias va desde la mantilla con peineta, una bata de guata o vestida de pelotari.

Tambascio declara que se ha seguido la partitura de Bizet. Pero con unas buenas modificaciones que van desde la introducción de boleros o ritmos de jazz. Toda la música suena en riguroso directo, pues en uno de los extremos del escenario se sitúa un pianista. Los actores-cantantes confiesan que lo que más les cuesta es no troncharse de risa durante las representaciones

Carmen, en el teatro Alfil (Pez, 10; metro Noviciado), desde el 1 de julio. De martes a sábados, a las 23.00. Domingo, 20.30. 2.000 pesetas.