El reingreso de los 76 empleados de las ITV costará unos 250 millones

La Generalitat acordó ayer con los sindicatos UGT, CC OO, CGT y CSIF el reingreso en la Administración valenciana de los 76 trabajadores de la empresa pública Sepiva, que prestaban servicio en la Inspección Técnica de Vehículos (ITV), cuya concesión se privatizó el año pasado. Fuentes sindicales estimaron el coste de la readscripción del personal entre los 250 y los 300 millones de pesetas. Los acuerdos previos a la privatización, alcanzados con los sindicatos, establecían que, dentro de un plazo, los trabajadores podían continuar prestando sus servicios en las ITV a cuenta de las empresas concesionarias, o bien podían solicitar su reingreso como funcionarios de la Generalitat. El personal se incorporará a puestos de trabajo de nueva creación o bien se amortizarán vacantes en la Administración que no estén ocupadas por interinos o por personal laboral temporal. El Gobierno valenciano fue informado recientemente del contenido del acuerdo en una de sus reuniones y lo dio por bueno. El personal se incorporará con carácter provisional a la Generalitat "a la mayor brevedad posible", a la espera de un plan de ordenación de los recursos humanos que supondrá su reingreso definitivo.