El equipo de Villalobos admite que este año no habrá presupuesto

El gobierno municipal de Málaga salió ayer al paso de las duras críticas vertidas desde la oposición por la ejecución del presupuesto de 1997 y acusó a ésta de ofrecer una visión "que no es la real". "Están contando una película sesgada e incompleta", aseveró el concejal de Urbanismo, Francisco de la Torre. El equipo de gobierno de Villalobos da ya por hecho que no habrá presupuestos para 1998 y que tendrá que pactar modificaciones con la oposición para afrontar proyectos concretos de inversión.

Precisamente el área de Urbanismo es la que ofrece menor índice de efectividad en la ejecución presupuestaria, pero el edil aseveró que hay gran parte de la inversión prevista en trámites y anunció que el Ayuntamiento ejecutará el presupuesto "al 100%". "¿Puede alguien pensar que las cosas que están en marcha de pronto se paran el 1 de enero?", se preguntó. Para el concejal de Economía, Gonzalo Gutiérrez de Pablo, "lo que debe preocupar al ciudadano es saber cuál es la situación financiera del Ayuntamiento; y está muy bien". Puso como ejemplo que el remanente de tesorería sea de sólo 133 millones de pesetas, cantidad que consideró "poco importante" sobre un presupuesto de 60.000 millones y recordó que en 1992 el remanente era de 13.000 millones de pesetas. Equipo de gobierno y oposición se han enzarzado en una guerra en la que se usan y se interpretan las cifras de forma parcial. Para el PSOE, uno de los datos más escandalosos es que los ingresos sólo hayan sido de 36.000 millones, cuando la previsión era de 46.000. Ésa es la cifra realmente recaudada, pero el equipo de gobierno se defiende con el dato de los derechos liquidados, que suman 44.000 millones. Transferencias de capital También sostiene el equipo de gobierno que las inversiones y transferencias de capital suman 4.546 millones de pesetas, y destaca que se trata de un "importante esfuerzo inversor" porque supone el 11% del gasto total del Ayuntamiento. Sin embargo, esta cantidad representa las dos terceras partes de lo proyectado, de forma que un tercio de lo presupuestado ni siquiera aparece no ya sólo entre lo gastado, sino entre las obligaciones reconocidas. En su defensa, el concejal de Economía prefirió referirse a la situación financiera global del Ayuntamiento, más que a la liquidación en sí de los presupuestos de 1997 y aseveró que la nueva operación de refinanciación de la deuda municipal, pendiente de aprobación por la Junta, permitirá que en los próximos tres ejercicios la corporación disponga de entre 10.000 y 12.000 millones de pesetas para nuevas inversiones. Gutiérrez de Pablo intentó un difícil ejercicio de equilibrio en cuanto al presupuesto de 1998. Por un lado acusó a la oposición de haber negado de antemano la posibilidad de una negociación y por otro reconoció que el equipo de gobierno no ha entregado a los demás grupos el borrador de presupuesto que, al menos IU, exigió para proseguir las conversaciones.