Un incendio en un garaje acaba con una mujer en coma y 18 intoxicados

Una mujer en coma, 18 intoxicados (tres graves) y 53 coches destrozados. Éste fue el resultado del incendio que se desató en la madrugada de ayer en un garaje de la calle de las Camelias (Hortaleza). El fuego se originó supuestamente por el estallido de una acumulación de gas. El humo tóxico ascendió por el edificio y, entre escenas de pánico, penetró en las casas y obligó al desalojo de 43 familias.

El garaje siniestrado tiene entrada en la confluencia de las calles de las Camelias y de las Petunias. Allí guardan sus coches más de cuarenta familias de cuatro bloques de cuatro alturas cada uno. Según los vecinos, el aparcamiento cumplía todas las medidas de seguridad.A las cuatro de la madrugada, el garaje reventó. El falso techo se hundió sobre los coches, que quedaron destrozados.

La deflagración originó un humo asfixiante que ascendió a las casas. Hubo escenas de pánico, gritos sin cesar y carreras desenfrenadas. La gente escapó por donde podía. Luis se tiró desde el primer piso: "Salimos por la terraza. El humo era irrespirable". "Pasé mucho miedo", dijo otra vecina.

Según la primera hipótesis policial, una combustión súbita por acumulación de gases causó el siniestro. Un equipo de Policía Científica trabajaba ayer en el bloque para descubrir el origen del accidente.

María Dolores Ruiz, de 49 años, fue la vecina peor parada. Sufrió una fuerte intoxicación por el humo. Fue entubada y evacuada por el Samur al hospital Ramón y Cajal. Anoche estaba en coma.

Dos hijos de María Dolores también fueron trasladados al hospital de La Paz a causa de la inhalación del humo. Se trata de Santiago Ojeda Ruiz, de 12 años, y su hermana Irene, de 19.

Otra mujer, cuya identidad no fue facilitada, fue ingresada en este mismo hospital al sufrir una posible fisura de vértebra cuando se descolgaba por una ventana para huir del humo. El Samur atendió a otras 15 personas en la misma calle.

Los bomberos desplazaron al lugar cinco vehículos y 25 hombres. Un ejército de ambulancias del Samur y coches del Cuerpo Nacional de Policía y de la Policía Municipal trabajaron durante varias horas para atender a los vecinos. Se repartieron mantas y alimentos.. La mayoría no pudo regresar a su casa. Los techos y paredes están cubiertos de hollín. Tampoco tenían agua, luz ni teléfono. Por otra parte, un incendio destruyó en la madrugada del domingo dos vagones de tren que se encontraban en el depósito que Renfe posee en el distrito madrileño de Fuencarral.