"Hay muchas Ritas en el mundo que tienen miedo a ser valientes"

Natalia Dicenta lleva más de media vida en los escenarios y casi todos sus papeles han tenido un rasgo en común: la valentía. Esta actriz, madrileña de 35 años, no se amedrenta ante las dificultades y lleva desde los 16 años dando vida en el teatro y la televisión a mujeres sin miedo, fuertes. Mujeres que, como ella, quieren ser dueñas de su propio destino. Así es Rita, el personaje que interpretará desde hoy hasta el domingo en el teatro Lope de Vega de Sevilla, según la imaginó Willy Russell. Educando a Rita, con traducción y versión de José Carlos Plaza, se estrenó el pasado febrero en Madrid y ahora llega a Andalucía. La obra, dirigida por Josu Ormaetxe, es una comedia dramática que protagonizan Natalia Dicenta y Chete Lera. Pregunta. ¿Puede ayudar el teatro a que algunas mujeres sean más valientes? Respuesta. Si, para mi el personaje de Rita es un ejemplo a seguir. Hay muchas ritas en el mundo que tienen miedo a ser valientes, pero que en un determinado momento se dan cuenta y asumen las riendas de su propia vida. Se dan cuenta que la vida no puede ser solo su familia y el trabajo, hacer lo que los demás esperan de ellas. P. ¿Cómo soluciona el problema su personaje? R. En la obra se dice que la cultura da la libertad y eso es cierto. Como decía Virginia Wolf en La habitación interior: la libertad sólo la encuentras a través de la independencia económica.Rita quiere saber porque es lo que hará que se sienta libre y, solo así, podra elegir. P. ¿Es esa valentía la que la ha impulsado a aceptar su primer largometraje? R. Siempre he hecho teatro y televisión y algunas colaboraciones pequeñas en películas pero ésta será mi primera protagonista. P. ¿Tiene ya un título el proyecto? R. Llevaremos al cine Maribel y la extraña familia, de Miguel Mihura y la rodará un director novel, Ángel Blasco, que lleva muchos años trabajando en producción. So todo sale cómo hemos pensado comenzaremos a rodar en junio en Barcelona. P. Una de sus últimas actuaciones en Sevilla fue La zapatera prodigiosa, con el Teatro de la Danza de Madrid, ¿tiene previsto participar en algún otro montaje de García Lorca en este año repleto de celebraciones? R. No este año. La zapatera fue mi primer Lorca y espero que no sea el último. Fue muy intenso porque tenía que cantar y bailar además de actuar, pero resultó maravilloso. Es un ejemplo de mujer valiente que, como muchos de los personajes de Federico, tiene que luchar contra viento y marea. P. ¿Qué le parece el teatro que se hace actualmente en Andalucía? R. La verdad es que no estoy muy informada. Mi carrera no me deja mucho tiempo libre para otras cosas.