Dos nuevos detenidos en Guipúzcoa por supuesta relación con el "comando Araba"

Dos personas más fueron detenidas en Guipúzcoa por la Guardia Civil en la madrugada de ayer, dentro de la operación iniciada el pasado lunes en Hondarribia (Guipúzcoa) con el arresto de tres hombres y una mujer a los que se acusa de formar parte del aparato de mugas que colaboró con el comando Araba desarticulado en marzo pasado. Aitor Ibarguren Legorburu fue arrestado en su domicilio de Oiarzun y Jesús María Sanmiguel Larrañaga en Hondarribia. Ambos fueron trasladados a la Dirección General de la Guardia Civil en Madrid.

Las detenciones ordenadas por el juez de la Audiencia Nacional Javier Gómez de Liaño forman parte de la operación policial abierta desde el fin de semana pasado, en la que ya habían sido detenidos con anterioridad otras cuatro personas. Éstas son el hijo del presidente de la Cofradía de Pescadores de la localidad de Hondarribia, Imanol Olaizola, y su esposa, Patricia Vélez, así como Tomás Elorriaga y Koldo Elizetzea, que declararán hoy ante el juez.En medios de la investigación se considera que los detenidos, miembros legales (no fichados) de ETA, podrían formar parte del aparato de mugas (paso clandestino de fronteras) y que presuntamente ayudaron a atravesar en barco la desembocadura del Bidasoa a los dos miembros liberados del comando Araba arrestados en marzo. Según estos medios, los detenidos colaborarían en este cometido desde el año 1995. Realizaban esta labor exclusivamente con los miembros de ETA y no con el material que se enviaba por otro procedimiento.

El nombre de Tomás Elorriaga figuraba en la documentación incautada en su día al dirigente de ETA en Francia José Manuel Arregui Erostarbe, Fitipaldi.

El ministro de Interior, Jaime Mayor Oreja, declaró ayer en el Congreso que los detenidos pueden estar vinculados al comando Donostia y no descartó que pudieran servir como enlace de varios comandos.

Por otro lado, el etarra Sergio Yegorov, Ruso, que fue detenido el pasado sábado en Toulouse (Francia), ingresó en prisión por orden de la juez antiterrorista Laurence Le Vert.