Caixa Laietana niega que incumpla normas de seguridad

Un portavoz de Caixa Laietana negó ayer que la sede central de la entidad bancaria, situada en Mataró (Maresme), incumpla la normativa vigente sobre medidas de seguridad, hipótesis que sostiene un informe realizado por los Mossos d"Esquadra tras el espectacular robo perpetrado en la pasada Semana Santa, en el que unos ladrones desvalijaron más de 300 cajas privadas de la cámara acorazada. La entidad de ahorro indicó que dispone todavía de un año para adecuarse a la ley, mientras que la policía autonómica sostiene en el informe que desde enero de 1997 la sede central de Caixa Laietana incumple la normativa sobre seguridad. El informe en cuestión, que ya está en manos del titular del juzgado número 6 de Mataró, que investiga el robo, determina que el edificio dispone de un sistema de seguridad anticuado. En concreto, no existen alarmas que detecten sonidos, vibraciones o cambios en la capacidad de volumen de la cámara acorazada. Tampoco hay en el edificio detectores de intrusos. Otro aspecto que recoge el informe es que el sistema de videocámaras no permite la grabación programada, lo cual significa que sólo pueden grabarse imágenes cuando un guardia de seguridad acciona el sistema manualmente. Según el informe, Caixa Laietana debía estar cumpliendo la normativa sobre seguridad privada desde enero de 1997. Fuentes de la policía autonómica han explicado que las inspecciones para comprobar la legalidad de las instalaciones se practican de manera aleatoria, cuando se produce un robo o cuando se abre un edificio de estas características. Inventario de joyas La entidad de ahorro negó ayer que las dependencias de la sede central estuviesen obsoletas en lo que se refiere a la seguridad. Un portavoz aseguró que existe un periodo de adecuación a la normativa, que en su caso expira en 1999. Mientras, los responsables de Caixa Laietana han devuelto ya algunos de los documentos que los ladrones abandonaron en la cámara blindada. Se trata de documentación oficial que los afectados guardaban en las cajas de seguridad. Respecto a la devolución de las joyas y los objetos de valor que los ladrones dejaron en la cámara acorazada, la entidad de ahorro ha explicado que todavía está llevando a cabo un inventario de este material. Aquellos objetos cuya propiedad sea dudosa serán expuestos y se realizarán ruedas de reconocimiento entre los afectados. Los ladrones accedieron a la cámara blindada de la sede central de Caixa Laietana a través de los conductos de la ventilación. Reventaron más de 300 cajas privadas y se llevaron el dinero que contenían. Ni los guardias de seguridad que vigilan la entidad ni las alarmas antirrobo advirtieron la presencia de los intrusos, que actuaron cómodamente aprovechando que el día era festivo.