El club blanco venderá entradas sólo a socios y por orden de reserva
La junta directiva del Real Madrid ha decidido vender las entradas disponibles para la final de la Liga de Campeones sólo a los socios, a causa de la desproporcionada demanda que existe, unas 17.000 peticiones. El número de localidades que la UEFA adjudicó al Real Madrid es de 14.000. Además, hay 500 entradas más pendientes retenidas en Amsterdam, ya que la policía quiere comprobar si cumplen las normas de seguridad exigidas por la UEFA. Las peñas, aficionados y simpatizantes no podrán adquirir ninguna localidad debido a que dicha desproporción de solicitudes no permitirá sacar ninguna a la venta, excepto las de los socios.
La adjudicación de las entradas, una sóla por cada socio, se formalizará por orden de reserva y en una oficina especial situada en la sede del club. Será una empresa contratada por el propio Real Madrid la que comunique, vía telefónica, a cada socio cuándo podrá presentarse en dicha oficina para la compra de sus billetes a partir del 4 de mayo. El precio de las entradas oscilará entre las 6.000 y 9.000 pesetas.
Además, por motivos de seguridad y regulación de la UEFA, en el momento de la compra el socio deberá firmar un recibo nominativo, en el que se identificará al adquiriente, el número de carné de socio y los datos específicos de la entrada adjudicada. Esto evitará la reventa, ya que será necesaria la presencia física del socio en la fecha en que se le haya indicado previamente.
Aunque no se ha facilitado la cifra exacta, Lorenzo Sanz, presidente del Real Madrid, ha afirmado que ha pedido a todos los jugadores, empleados y directivos un esfuerzo de reducción en el número de sus localidades para que se puedan cumplir en lo posible las peticiones de los socios. «Debe haber comprensión y disminuir el número de compromisos adquiridos», explicó Sanz, que expresó su desacuerdo con que el aforo se haya reducido de 51.000 a 48.000 localidades por razones de seguridad y que de éstas, sólo 28.000 se repartirán entre el Real Madrid y la Juventus, ya que las restantes se distribuirán entre la Federación Holandesa, patrocinadores y la UEFA.
Eriksson, la opción
En cuanto a la sucesión en el banquillo madridista, la opción del sueco Sven Goran Eriksson, entrenador del Lazio, ha tomado fuerza en la lista que ha tratado de agilizar la junta directiva. Descartado Marcello Lippi, el técnico del Juventus, y tras perder fuerza Alberto Zaccheroni, del Udinese, el nombre de Eriksson, que siempre estuvo entre los posibles candidatos, ha subido aún más enteros en los últimos días, tras eliminar al Atlético de Madrid en las semifinales de la Copa de la UEFA. El equipo romano jugará la final del torneo frente al Inter. Del entrenador sueco, que ha hecho una larga carrera en Italia, se valora, según informaron fuentes del club, su capacidad de mando, además de sus dotes técnicas.
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