Felipe González se pone a disposición del nuevo candidato socialista

Por fin hablaron. El ganador en las primarias del PSOE para ser el candidato a la presidencia del Gobierno, José Borrell, habló el sábado por la noche con el ex secretario general Felipe González. La llamada, a iniciativa de Borrell, dio frutos. González se le ofreció para lo que pudiera servirle y en breve se reunirán. "Tendré su apoyo y su consejo, que valoro muchísimo aunque sé que nunca tendré el caudal de conocimientos y experiencias que él tiene", dijo Borrell. El ganador obviará desde hoy que González apoyó a su rival.

En la noche de su triunfo José Borrell no pudo contar con la felicitación de Felipe González, algo que le hubiera satisfecho sobremanera y que pudo deberse a "fallos propios de los momentos de confusión" que se vivieron en Ferraz tras el inesperado triunfo del ex ministro de Obras Públicas en su contienda contra el ex secretario general del PSOE, señalan miembros de la ejecutiva. También Borrell insiste en que no tiene importancia. El ex presidente del Gobierno llegó a la sede federal del partido pasada la medianoche y de inmediato se entrevistó con Joaquín Almunia. Media hora más tarde preguntó por Borrell para felicitarle y charlar con él. "Se ha ido", le dijeron.

"Yo no me enteré de que Felipe estuvo en Ferraz en la noche del escrutinio, pero no pasa nada, si hubiera sabido que estaba me hubiera quedado, pero no tiene importancia", insistió ayer Borrell. Realmente lo que tenía ganas de contar es que ya había hablado con el ex presidente del Gobierno y éste se había puesto a su disposición para ayudarle en lo que pudiera.

"Le pedí que me ayudara y, como yo esperaba, me dijo que tendría su apoyo, su consejo y su colaboración para lo que me hiciera falta", dijo en tono alegre. "Estoy seguro de que contaré siempre con él, nada menos que se puso a mi disposición para ayudarme", remachó.

Todo ocurrió en una conversación telefónica, en la noche del sábado, con la que Borrell quedó muy satisfecho, sobre todo, porque se citaron para una reunión en los próximos días. El ex jefe del Ejecutivo pondrá a disposición del nuevo candidato todos los documentos en los que está trabajando desde Progreso Global, fundación que preside.

El candidato Borrell piensa olvidar que Felipe González apoyó sin reservas a Joaquín Almunia en esta carrera. Sus colaboradores prefieren en estos momentos recordar los gestos que González tuvo a su favor y dejar en segundo término la apuesta decidida que hizo por el rival.

González, incluso cuando anunció su voto a favor del secretario general del PSOE, no olvidó felicitar a Borrell "por haber aprovechado este espacio de libertad que se abría en el partido". "Bien hecho, Pepe", repetía. Después, acudió por sorpresa a la librería Fuentetaja donde el aspirante a candidato Borrell presentaba un libro de artículos propios.

Tan sólo cuatro días antes, ese mismo marco sirvió para que la periodista Mariló Suárez presentara su libro Los secretos de Almunia. Allí también estuvo González, una representación más que nutrida de la ejecutiva federal y otros muchos dirigentes. Al acto de Borrell, sin embargo, sólo acudió el ex presidente, que acompañó al grupo de apoyo del ex ministro de Obras Públicas, ajeno en su totalidad a la dirección socialista.

A los colaboradores de Borrell les gusta recordar también el artículo que el ex presidente del Gobierno escribió en EL PAÍS y en el que anunciaba su apoyo a Almunia públicamente. "Felipe dijo que Joaquín era su hijo predilecto pero no dijo que Pepe fuera el pródigo", relatan estos interlocutores.

La importancia que durante toda la campaña tanto los partidarios de Almunia como los de Borrell han dado a los gestos de González ha sido más que notable. El secretario general del PSOE llegó a desear en público que González dijera el sentido de su voto. Los colaboradores de Borrell suspiraban porque no lo hiciera y confiaban en que sus obligaciones internacionales no le permitieran llegar al acto de cierre de Almunia en Madrid. Pero llegó.

Borrell quiere pasar esa página y quedarse con lo último, que es su oferta de ayuda. Durante su campaña ha reivindicado a González como "patrimonio de todos".