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La Liga española es la segunda más cara de Europa, detrás de la inglesa

La Liga española de fútbol es la segunda más cara de Europa. Los datos no engañan. Su presupuesto de ingresos de esta temporada en Primera División roza los 80.000 millones de pesetas. Sólo es rebasado por la Liga inglesa (86.531 millones) y por debajo se encuentra la Liga italiana (74.989 millones), estimada como una de las más importantes del mundo. A una distancia ya considerable se encuentra la liga francesa, con 61.000 millones. La principal base de los ingresos del fútbol español ha pasado a ser la televisión. Los expertos apuntan la conveniencia de que los clubes españoles abran el abanico a otras fuentes de ingresos, aún por explotar, para que el negocio no acabe en bancarrota.

Los ingresos de los clubes se han disparado, según un estudio elaborado por la firma consultora Alpha Corporate, del grupo Arthur Andersen, debido al interés de las cadenas de televisión por transmitir sus partidos. La Primera División, en las cuatro últimas temporadas, ha incrementado sus ingresos en un 70% y gran parte de ese porcentaje obedece a la venta de los derechos de televisión. A pesar de la escalada de transmisiones de sus encuentros, la asistencia a los estadios registra un crecimiento sostenido en los últimos años. Mientras en la temporada 1989-90 el número de espectadores superó por poco los 10 millones, en la pasada se sobrepasaron los 13 millones. La procedencia de los ingresos aporta un elemento esclarecedor sobre la estructura económica del deporte de masas por excelencia en Europa. Es especialmente llamativo el caso de la Liga española. Los derechos de televisión representan casi el 30% de los ingresos totales de los clubes, muy por encima de lo que sucede en Inglaterra (10%), Portugal (15%), Italia (20%), Francia (23%) o Alemania (25%). En contraste, en España los ingresos de otras fuentes, como el patrocinio, el merchandising (venta de productos con el nombre o emblema del club), o la publicidad son unos de los más raquíticos del fútbol europeo, con tan sólo un 10%.

Los responsables del estudio consideran que ese incremento de ingresos ha estimulado una espiral de gastos en el fútbol español, sobre todo con una política de fichajes poco científica y decidida a menudo por las tensiones del último momento de los dirigentes de los clubes. La inflación se ha desatado en los precios. Los fichajes han crecido un 50% en sólo un año. Los 27.585 millones de pesetas invertidos en la temporada 1996-97 se han convertido en más de 52.000 millones en la actual. A esta cifra hay que añadir otros varios miles de millones de los fichajes de invierno, los que se realizan del 15 de diciembre al 15 de enero siguiente, periodo en el que se abre el mercado.

Escalada de salarios

La escalada ha extendido sus repercusiones a los salarios de tal forma que los principales clubes españoles, como el Real Madrid o el Barcelona, se han colocado por encima de otros clubes extranjeros con parecido presupuesto. Mientras que en la temporada 1996-97 el Barcelona pagó en salarios 4.377 millones y 4.725 el Real Madrid, el Manchester United inglés desembolsó 3.835 millones y el Bayern Múnich, 3.300. Una vez más Italia se sale de la tabla con una nónima de 7.623 millones, en el caso del Milan, y de 5.300, en el Juventus. Esta situación es insostenible de cara al futuro a juicio de expertos y analistas del sector. Para éstos no tiene lógica que el fútbol en un país como España, con menor población y, por lo tanto, menos público televisivo potencial que vecinos como Francia, Italia o Alemania, pueda fundamentar su crecimiento futuro en el aumento potencial de los ingresos televisivos una temporada tras otra. En el deporte profesional de Estados Unidos, la televisión representa un 55% de los ingresos del fútbol americano, el 38% del béisbol y el 37% del baloncesto, apuntan Rafael Roldán y Manuel Sánchez de Lamadrid, representantes de Alpha Corporate.

El previsto estancamiento de estos ingresos plantea, según los expertos, la necesidad de que los clubes exploten mejor otras fuentes de ingresos, sobre todo el merchandising y el patrocinio. El estudio de la consultora Alpha Corporate detaca el caso del Manchester United. Los ingresos del club inglés por ese concepto «superan los 6.350 millones de pesetas, un 40% de su facturación total». Según el estudio, «la planificación y desarrollo de esta función ha de acercarse a los modelos de mayor eficacia comercial, que son los que dominan el mercado de Estados Unidos donde el negocio de merchandising en las tres principales ligas profesionales (fútbol americano, baloncesto y béisbol) mueve cifras superiores a 1,1 billones de pesetas».

En Estados Unidos, los ingresos por merchandising se han más que doblado cada año en la última década. A pesar de la gran dimensión del mercado estadounidense, las cifras pagadas en concepto de patrocinio, por ejemplo por empresas fabricantes de prendas deportivas, son similares a las europeas. Adidas patrocina a los New York Yankees, equipo de béisbol, por una cifra de 15.000 millones de pesetas durante 10 años.

Otro de los elementos apuntados por los expertos de Alpha Corporate es la explotación más intensiva de los estadios. «Hasta ahora son utilizados un promedio de una hora y media cada 15 días (coincidiendo con la disputa de los partidos) y solamente mientras está viva la temporada», señaló Rafael Roldán. «Es irracional», añadió, «que un gran espacio de tales dimensiones, por lo general ubicado en zonas privilegiadas de las grandes ciudades, no se rentabilice con otras ocupaciones». Clubes como el Barça y el Atlético de Madrid están dando ya los primeros pasos en esa línea, mientras que el proyecto de traslado del Santiago Bernabeú, el campo del Real Madrid, también apunta en la misma dirección.

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