El día después para el partido y los candidatos

A partir de hoy, día de la votación, podrán verse las consecuencias que traerá el proceso de primarias para el partido y para los dos candidatos. En primer lugar, se verá si se cumplen las proclamas tanto de Almunia como de Borrell de que el partido saldrá más unido y reforzado del proceso electoral. También habrá que analizar si trae consecuencias en las distintas federaciones el que sus dirigentes regionales, provinciales y municipales se hayan dividido entre uno y otro candidato. Por último, si Almunia gana, como prevé la mayoría, tendrá que pensar qué papel asigna a José Borrell. De momento, la entrada en escena de Felipe González con su respaldo a Almunia no ha supuesto mucho quebranto para los partidarios de su rival. "Felipe ha dicho que Almunia es su primogénito, pero no ha dicho que Borrell sea el hijo pródigo", interpretaba ayer un colaborador del ex ministro de Obras Públicas.

Uno y otro tienen difícil esgrimir diferencias ideológicas, ya que ambos se han esforzado, aunque fuera tácticamente, por negarlas. José Borrell ha querido centrarse y hablar de políticas "socialmente aceptadas", y Joaquín Almunia ha negado que fuera la derecha de la izquierda y se ha definido simplemente como "socialista".