Un año de cárcel por estafa al simular ser mujer de Mendiluce

La Audiencia de Barcelona condenó ayer a Anna Rebagliato Nadal a un año de prisión y multa de 9.000 pesetas como autora de tres delitos de estafa por los que se apropió de 285.000 pesetas para supuestas acciones de solidaridad, obtenidas haciéndose pasar por la compañera sentimental del eurodiputado socialista José María Mendiluce. La fiscal reclamaba inicialmente tres años de prisión para la mujer por un delito continuado de estafa, pero antes de empezar el juicio la acusada reconoció los hechos de los que la acusaban y el ministerio público rebajó su petición de pena. De esta manera se evitó la celebración de la vista y una posible condena que hubiera comportado el ingreso en prisión. Los hechos juzgados ayer se remontan a 1996, coincidiendo con el final de la guerra en la ex Yugoslavia, en la que Mendiluce destacó por su gran actividad en favor del pueblo de Bosnia. En aquella época se celebraba también todo tipo actos de solidaridad que tuvieron muy buena acogida entre la población. El fiscal considera que Rebagliato, "con la finalidad de obtener pingües e ilícitas ganancias, ideó un plan" que consistía en fingir ser colaboradora de determinadas asociaciones dedicadas a la ayuda humanitaria y añadía ser la compañera sentimental de Mendiluce. Dinero para una causa justa Cuatro personas se creyeron la farsa y entregaron dinero con esos fines, convencidas de que ayudaban a una causa justa. Así, en el mes de marzo de 1996, la acusada estableció contacto con una militante de la agrupación del Partit dels Socialistes del distrito barcelonés de Ciutat Vella, María Josefa A. M., y se introdujo en sus círculos. Cuando Rebagliato se ganó la confianza de María Josefa, le pidió dinero "para los niños de Bosnia", y en el mes de agosto de 1996 esta última le entregó gran cantidad de ropa, cuyo valor no ha sido cuantificado, que se quedó la acusada. La perjudicada ha renunciado a ser indemnizada. De la misma manera fue estafada Concepción R. J., quien entregó a la procesada ropa que fue vendida por 20.000 pesetas, y en el mes de junio de 1996 le acabó dando otras 25.000 pesetas para la compra de unos electrodomésticos que iban a ser vendidos para ayudar también a Bosnia. En septiembre de 1996, la acusada estableció contacto con María Felicidad L. T., vinculada a la asociación Ens Movem, a quien pidió dinero para que pudiera realizarse una operación de médula espinal a un niño bosnio. Así logró 170.000 pesetas. La cuarta víctima fue Diana F. Z., a quien la procesada hizo creer que era colaboradora de las asociaciones Pont de Cultura y Bosnia Encara. Esa estafa fue de 90.000 pesetas y la supuesta utilidad del dinero, la adquisición de ordenadores para su envío a Bosnia. La conformidad pactada ayer antes del juicio comporta que la acusada devuelva las 285.000 pesetas estafadas.