Indignación en Valencia por las entradas para la final de Copa
La incredulidad y la indignación se apoderó ayer de miles de aficionados que querían comprar en el estadio de Mestalla entradas para la final de la Copa del Rey que enfrentará el día 29 al Barcelona y al Mallorca. En apenas 40 minutos, se acabaron las 3.000 entradas que se pusieron ayer a la venta y más de 2.500 personas se quedaron sin la localidad que pretendían. Un grupo de unos 100 aficionados mostró su disgusto ante las taquillas que ya estaban cerradas y la policía solicitó refuerzos en previsión de posibles altercados, ya que se vivieron momentos de tensión. Las entradas salieron a la venta al precio de 4.000 pesetas y cada aficionado podía adquirir un máximo de dos. El hecho de que la policía comunicara que el día de la final, en cumplimiento de la normativa vigente, se pondrán a la venta algunas entradas, no convenció a los seguidores que hicieron la cola, la mayoría simpatizantes del Barcelona, algunos de los cuales corearon el grito de «Juve, Juve», en alusión al rival del Real Madrid en la final de la Copa de Europa. Algunos de los aficionados habían estado apostados en el estadio de Mestalla desde la 18.00 horas del lunes.
Para la final de Copa del Rey, la Federación Española de Fútbol ha previsto un aforo en Mestalla de 48.000 localidades y ha distribuido la concesión de localidades de la siguiente manera: unas 23.000 para los seguidores del Barcelona, unas 13.000 para los aficionados del Mallorca, cerca de 5.000 para que el Valencia las reparta entre sus seguidores (aunque el club valenciano sólo puso ayer a la venta 3.000), y el resto (7.000) para los diversos compromisos federativos.
500 policías
Así pues, cerca de 23.000 seguidores del Barcelona y 13.000 del Mallorca se desplazarán el día 29 a Valencia en viajes organizados con el fin de presenciar en directo la final de la Copa. Un total de 500 funcionarios policiales trabajarán el día del encuentro, muchos de ellos llegados desde otras comunidades autonómas, según informó Segundo Martínez, Jefe Superior de Policía de la Comunidad Valenciana. Al margen de estos seguidores, que llegarán a Valencia en avión, autobús, tren y barco, también estarán presentes aficionados que lo hagan por su cuenta o que residan en Valencia y lugares próximos a esta ciudad y que completarán, junto a los aficionados valencianos, el aforo del estadio.
Ayer se reunieron en Valencia representantes de la Jefatura Superior de Policía, la Casa Real, la Federación Española de Fútbol, el Aeropuerto de Manises, el Puerto de Valencia, Renfe, Policía local, Protección Civil, Cruz Roja, Barcelona, Mallorca y Valencia para estudiar el dispositivo en torno a la organización del partido. Los aficionados que se desplacen en viajes organizados lo harán acompañados por funcionarios policiales para garantizar la seguridad y prevenir incidentes.
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