Cepsa se ofrece para construir un gasoducto que conecte con Francia

La Compañía Española de Petróleos (Cepsa) se ha ofrecido a construir, con la inversión que sea necesaria, un gasoducto entre Barcelona y Toulouse (Francia) con el fin de unir la red española a la europea y garantizar la llegada de gas natural no sólo por el sur (en la actualidad existe una conexión de Serrablo con Lacq). El objetivo es romper el monopolio de la empresa Gas Natural, controlada por su rival Repsol y La Caixa, y del suministro del gas argelino.Así lo explicó ayer a la prensa Carlos Pérez de Bricio, presidente de Cepsa, que hoy va a proponer repartir un dividendo de 70 pesetas complementarias a las 60 de octubre (130 en total) en la junta general de accionistas. La empresa ganó el año pasado 27.800 millones de pesetas y ha cerrado el primer trimestre de este año con un beneficio consolidado antes de impuestos de unos 10.200 millones.

Pérez de Bricio aseguró que el consumo de gas natural aumentará considerablemente en los próximos años. En gas butano, Cepsa ya cuenta con una bombona que espera comercializar para competir con Repsol.

Por otra parte, Cepsa y el BCH potenciarán la prestación de servicios financieros en las principales gasolineras del grupo. El banco, accionista tradicional de la petrolera, prestará atención bancaria y de seguros a través de terminales multiservicios. La iniciativa arrancará en unas 100 gasolineras, las más significativas del grupo, en ciudades, autovías y principales carreteras. Hoy, CEPSA cuenta con 1.600 (sin contar otros 200 puntos de venta de un sólo surtidor) y ha implantado ya las tiendas Depaso.

El capital de Cepsa está controlado en un 80% por el BCH, Endesa, Unión Fenosa, la petrolera francesa Elf y la del emirato de Abu Dabi, IPIC. Por su parte, Cepsa ha constituido una sociedad en Marruecos al 50% con Abu Dabi con el objetivo de abrir 100 gasolineras en el país norteafricano y copar el 10% del mercado en el 2002.