¿Lleva usted a su hijo una piscina?

No voy a cargar las tintas ni a buscar culpables sobre la desafortunada muerte en una piscina de un niño de cuatro años cuando iniciaba su aprendizaje de la natación.Sólo quiero que la sociedad reflexione sobre la importancia de que se regule la contratación laboral de los profesores de natación y se desarrolle una normativa que garantice la seguridad en las piscinas.

Los padres deben saber que el intrusismo en esta profesión es habitual, muchos "profesores" son antiguos nadadores, sin titulación alguna que les capacite para la enseñanza, con escasa profesionalidad y, en ocasiones, son menores de edad. La ratio profesor-alumnos se hace más pensando en el "negocio" que en el fin de utilidad pública que principalmente debería perseguir. Las contrataciones (si es que se hacen) intentan cubrir las funciones de profesor y socorrista con el fin de ahorrar un puesto de trabajo. Si después de este hecho se sigue echando la vista a otro lado y no se regula la enseñanza de la natación y las condiciones de seguridad de las piscinas en este tipo de actividad, los verdaderos profesionales seguiremos con el alma en vilo y la espada de Damocles a punto de atravesarnos.- Secretario general de la Asociación Española de Técnicos de Natación.