La suerte del novato

Las cámaras de televisión y los fotógrafos no perseguían ayer a Raúl. Por primera vez en mucho tiempo el delantero disfrutó de una jornada de asueto con los medios de comunicación. Ayer, el delantero que todos los periodistas buscaban en la Ciudad Deportiva del Madrid era otro, era Fernando Morientes.Doce horas antes, Morientes había marcado dos goles en cinco minutos, un hecho que por sí sólo le habría convertido en noticia, pero más destacada aún al tratarse de su primer partido con la selección. "¿Hay alguna foto mía en los periódicos?", fue lo primero que preguntó. Luego extendió los diarios y sonrió plácidamente al comprobar que en todos había noticias que hablaban de él. "Clemente me advirtió después del partido que se iba a formar todo este revuelo pero que tuviera cuidado y mantuviera los pies en el suelo, que tenía que seguir trabajando". El seleccionador acertó, pero Morientes quiso al menos por un día disfrutar de su recién alcanzada gloria.

"Todavía estoy en una nube. No me podía imaginar que en el primer minuto del partido tuviera un balón de gol. No me lo había terminado de creer cuando marqué el segundo". Morientes, a esas alturas, había perdido los nervios del debú. "Sí, estaba inquieto antes. Temía no jugar, pero cuando ví mi nombre en la lista se me pasó la ansiedad". Luego, en el terreno de juego, recibió el apoyo de sus compañeros y un vaticinio de Santi. "Vas a marcar". Morientes lo había pensado pero se quitó la idea rápidamente de la cabeza. Los debús, recordó, siempre se le dan bien. "Marqué en mi primer partido con la sub 18, luego con la sub 20 y también en la sub 21. Logré dos goles con el Madrid en Salamanca y pensé que a lo mejor en Balaídos pasaba lo mismo, pero nunca imaginé que fueran dos". El segundo gol tiene además un antecedente. "Raúl y yo hicimos uno igual ante la República Checa. Es una jugada que ensayamos muchas veces en los entrenamientos".

Sus compañeros del Madrid le recibieron con abrazos y Heynckes le dio la enhoabuena. Panucci fue el más efusivo: "Tiene un gran futuro y algunas veces veo en él detalles que se asemejan a Marco Van Basten. No digo que sea como él, pero a veces se parece bastante".

"Eso es una pasada, pero se lo agradezco a Panucci", respondió Morientes. "Ya me gustaría... Van Basten es uno de mis jugadores favoritos, a lo mejor lo dice porque soy alto como él y no voy mal de cabeza. Aunque he de reconocer que algunas veces trato de imitarle".

La última noche, Morientes durmió unas horas gracias al efecto de una pastilla que le ayudó a relajarse. A partir de ahora, el sueño se lo quitará la incertidumbre por ser titular en el Madrid. "Aquí es donde debo ganarme el puesto para el Mundial".