Almunia emplaza a Borrell a que diga si competirá contra él en las primarias internas
"Si te presentas házmelo saber, pero que sepas que será una competición de verdad". La frase del secretario general del PSOE, Joaquín Almunia, iba dirigida a José Borrell, pero no hubo respuesta del interpelado. Hace varios días, en una reunión sin publicidad, Almunia quiso saber de primera mano si Borrell va a concurrir a las elecciones primarias internas de las que saldrá el nombre del candidato socialista a la presidencia del Gobierno. El primer secretario del PSC, Narcís Serra, hizo ayer la misma pregunta, pero Borrell contestó que se lo está pensando.
Precisamente, fuentes de los socialistas catalanes han admitido que la posible candidatura de Borrell provoca "cierta incomodidad" en las filas del PSC, informa .Borrell tomará la decisión después de escuchar a los miembros del comité federal, que hoy se reúne todo el día para debatir y aprobar el proceso electoral intemo. Aunque ante la proximidad de la cita muchos focos se han dirigido a este diputado catalán, lo cierto es que el propio Almunia, sin publicidad ni aspavientos, le convocó a una reunión hace varias semanas para hablar de su futuro, según fuentes conocedoras del encuentro.
El líder del PSOE le preguntó directamente a Borrell si quería presentarse a las primarias, a lo que su compañero de ejecutiva le respondió que no tenía tomada la decisión. Las fuentes citadas aseguran que Almunia dejó claro a Borrell que si concurría iba a ser "una competición de verdad". Asimismo le pidió que se lo comunicara lo antes posible. Estas palabras que se atribuyen al líder del PSOE se enmarcan en su deseo de que las primarias lo sean en toda regla y que concurra todo el que lo desee. Un mensaje que reiteró ayer el secretario de organización, Cipriá Ciscar, autor del reglamento de las primarias que se debatirá hoy.
En la reunión entre ambos y antes de pasar a hablar de candidaturas a la presidencia del Gobiemo, Almunia ofreció a Borrell ser el candidato socialista a la comunidad de Madrid. El ex ministro respondió que no le parecía adecuado, ya que es diputado por Barcelona. En cambio, se mostró dispuesto a considerar ser candidato al Ayuntamiento de Madrid. Almunia respondió que el partido tenía ya a la persona adecuada para rivalizar con el actual alcalde, el popular José María Alvarez del Manzano. No dijo su nombre, pero sin duda se trata de la diputada por Málaga y ex ministra de Asuntos Sociales Cristina Alberdi.
Aunque las candidaturas para ayuntamientos y comunidades autónomas se regularán también por primarias, sus calendarios serán posteriores al de la presidencia del Gobierno, que hoy será fijado por el comité federal. Borrell y otros miembros de este órgano de dirección del PSOE quieren comprobar si este innovador proceso de elecciones internas es riguroso, democrático y "de verdad". El propio Borrell considera que el plazo de recogida de firmas no debe empezar este lunes y hasta el 7 de abril, sino que debe posponerse una semana más y ampliar el plazo de dos a tres semanas.
Asimismo está previsto que la campaña interna entre candidatos, si es que hay más de uno, dure siete días. Habrá enmiendas para que se aumente a 15, pero no es probable que triunfen. Ciscar rechaza este plazo argumentando que si los ciudadanos tienen 15 días en unas elecciones, en un colectivo de menos de 400.000 personas, y para elegir a conocidos dirigentes del partido, basta una semana.
Sí hay voluntad, sin embargo, de atender las enmiendas de Izquierda Socialista para disminuir el número de firmas necesarias para ser candidato en las primarias. Ese 10% puede pasar a ser de entre un, 6 y un 7%, es decir, alrededor de 25.000 firmas. Almunia ya ha declarado que él quiere someterse a esta opción, es decir, la firma directa de los militantes.
El líder del PSOE no quiere ser elegido por ninguna de las otras tres vías: mayoría de la ejecutiva, mayoría del Consejo Político o 20% del comité federal. Borrell, sin embargo, según fuentes de su entorno, sólo ve posible acudir a la fórmula del 20% del comité federal, un órgano de algo más de 200 miembros, ya que no cree posible que sin el apoyo de los aparatos de cada federación pueda recabar en 15 días firmas suficientes.
En principio, nadie duda de la integridad de Almunia y, por tanto, de su deseo de que a nadie se le dificulte su candidatura, aunque hay algo que no ha gustado a distintos miembros del comité federal, como Borrell, Luis Yáñez o la vasca Rosa Diez. Almunia advirtió que si es candidato y pierde, tendría que dejar la secretaría general. Los críticos creen que eso puede condicionar a la militancia a apoyar a su secretario general para no abrir una crisis interna.
Pero Ciscar no opina lo mismo: "Es una muestra de la nobleza de Almunia, que no piensa en lo que puede ser políticamente correcto. Lo que dijo es de sentido común y seguro que así lo han acogido los militantes".
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