Vía Digital y su canal médico se acusan de incumplir el contrato

Medisat, un canal destinado exclusivamente al sector médico, ha dejado de emitirse en Vía Digital. La productora considera que la plataforma ha incumplido el contrato suscrito entre ambas partes y acusa a Vía Digital de no haber instalado el descodificador "a los 3.000 médicos inscritos" ni a los "más de 250 centros de salud y hospitales" comprometidos. Vía Digital atribuyó a Medisat la suspensión del canal, al haber cortado la señal durante más de veinte días "por causa únicamente imputable a dicha sociedad".

Medisat, la empresa productora del Canal Médico, recientemente retirado de la oferta de Vía Digital, reclamó ayer a esta plataforma digital que restablezca las emisiones del mismo, ante "la situación crítica" que le ha provocado. La productora de, Canal Médico aseguró, a través de un comunicado, que tiene "un contrato en vigor, en exclusiva, y por tres años de duración, que Vía Digital como proveedor del servicio no puede rescindir de forma unilateral, saltándose de hecho el obligado arbitrio que recoge el contrato entre ambas partes".Canal Médico dijo no entender la situación "cuando Vía Digital es conocedora de los compromisos adquiridos por el Canal Médico desde hace más de un año". Estos compromisos incluyen acuerdos "de producción y emisión" con distintas sociedades científicas, "y con más de 250 centros de salud, hospitales e instituciones sanitarias, a los que Vía Digital no les ha instalado los equipos de recepción, antena y descodificador, sin justificación alguna". Canal Médico también reprochó a Vía Digital que no haya instalado los equipos de recepción "a los más de 3.000 médicos inscritos en el canal, desde el 15 de noviembre hasta finales de enero de 1998, sin que haya una justificación técnica al respecto".

Medisat asegura tener contratos con entidades internacionales como el American College, la Clínica Mayo, el canal europeo Eurotransmed, Medivision, Mednet, entre otros, así como con laboratorios farmacéuticos, para la emisión de congresos y cursos "dentro de las más de 600 horas de programación que ya tiene producidas".

Por su parte, Vía Digital explicó que la retirada de este canal de su oferta se debió a que "el 23 diciembre esta sociedad suspendió sus emisiones por causa únicamente imputable a esta empresa, inclumpliendo así el contrato firmado con Vía Digital en agosto de 1997".

En un comunicado la plataforma digital afirmó que, "ante la gravedad de la situación que se perpetuaba en el tiempo sin ser subsanada y el consiguiente perjuicio cuasado a sus abonados", el 13 de enero instó notarialmente a Medisat para que reanudara la puesta a disposición de la señal, "so pena de dar por resuelto el contrato en el plazo de 14 días que se prevé en el mismo". Según Vía Digital, "transcurrido dicho plazo Medisat no subsanó el problema y el contrato quedó automáticamente resuelto, hecho que se comunicó oficialmente a Medisat" el pasado 12 de febrero.

Fuentes de la plataforma que preside Pedro Pérez afirmaron ayer a EL PAÍS que, "en ningún caso, por el hecho de existir Medisat, los médicos tenían preferencia a la hora de instalarles el descodificador o la antena". Estas fuentes insistieron en que la responsabilidad de transportar la señal y sus costes "corresponde por contrato a Medisat".

El Canal Médico fue emitido en abierto por Vía Digital hasta el pasado 1 de diciembre. Hasta entonces sólo ofrecía informaciones sobre sus contenidos. A partir de esa fecha, con el canal ya encriptado, sólo podían visionar el mismo aquellos abonados que acreditasen pertenecer a un colegio profesional del sector -médicos, farmacéuticos, veterinarios y enfermeros-, ya que incluía publicidad para estos colectivos. En el teléfono de abono de Medisat ayer se difundía el siguiente mensaje: "La suscripción queda suspendida hasta que se solucionen los problemas técnicos de Vía Digital".