Rodríguez asegura que "no se ha roto el consenso" con el PSOE en política exterior

El Gobierno asegura que no "hay discrepancias" ni se ha roto el consenso con el PSOE en política exterior por las declaraciones del secretario general socialista, Joaquín Almunia, sobre Chiapas. Almunia manifestó su desacuerdo con una parte de la resolución de la Comisión de Exteriores del Congreso, que condenó la actuación del Gobierno mexicano en Chiapas, al poder interpretarse como una injerencia en los asuntos internos de otro país.

El Ejecutivo también valora que no se ha roto dicho consenso por las declaraciones críticas de Almunia sobre la política del PP en relación con Cuba o por haber rechazado el PSOE un acuerdo ofrecido por el Gabinete de Aznar para bloquear la participacion de las autonomías en el Consejo de Ministros de la Unión Europea (UE), solicitada por el PNV con el respaldo de los demás grupos nacionalistas e Izquierda Unida (IU).

"No entendemos que se haya roto ningún consenso y es voluntad del Gobierno que no se rompa ese acuerdo", manifestó ayer el portavoz del Gobierno, Miguel Ángel Rodríguez, al finalizar la reunión del Consejo de Ministros. "Cuando se pregunta al Gobierno sobre esta polémica [la suscitada por la referencia de Almunia a Chiapas] no se habla de una polémica entre el Ejecutivo y el secretario general del PSOE, sino más bien entre los miembros del PSOE, los grupos parlamentarios y el secretario general del PSOE. Esta es una polémica de la que el Gobierno se siente alejado".

Rodríguez se refirió también a las relaciones del Ejecutivo con el PNV, que calificó de "buenas" pese a los conflictos en varios frentes: política antiterrorista, desarrollo estatutario. El portavoz confirmó que la próxima semana el Ministerio de Administraciones Públicas cerrará un acuerdo de traspasos de materias menores con el Gobierno vasco y que el presidente, José María Aznar, se reunirá próximamente con el líder del PNV, Xabier Arzalluz: "Lo mejor es que en estas conversaciones, se puede obviar [aquello en] lo que sabemos que no vamos a llegar a acuerdos. Quizá sea una buena táctica de dos aliados en una alianza que, insisto, está funcionando más que correctamente".