España e Inglaterra denuncian ante la FIFA la venta de localidades del Mundial 98

Federaciones de varios países, entre ellos España, han mostrado su indignación a la FIFA por el reparto de entradas de pago del próximo Mundial de Francia 98. Los dirigentes del fútbol español exponen como muestra que han solicitado entre 10.000 y 11.000 localidades para la final y su organización les ha ofrecido 70. La Federación Española ha remitido a la FIFA una carta de protesta por esa distribución y ha enviado una copia del escrito al resto de los 31 países finalistas. La Federación inglesa se ha unido ya a la campaña y califica de "intolerable" el proceder de los organizadores franceses.El pasado 15 de enero, mes y medio después de conocerse los rivales de España en la primera ronda de la fase final y según la dinámica de la solicitud de entradas, pidió 11.000 localidades para su partido frente a Nigeria, y 7.500 para cada uno de los encuentros ante Paraguay y Bulgaria. La respuesta no pudo ser más decepcionante. La FIFA asignó a la Federación un cupo, respectivamente, de 2.500, 2. 100 y 1.900 entradas.

La Federación Española, en su escrito de protesta, se queja de que incluso la FIFA incumpla sus directrices, expuestas de forma oficial en una de sus circulares. La FIFA estableció que se reservaría el 20%, como mínimo, de las localidades de cada partido y que de ese porcentaje destinaría el 80% a los equipos de cada encuentro. Según estos porcentajes y el aforo de los campos donde España ha de jugar la primera ronda del Mundial, le correspondería, como mínimo, 4.200 localidades del partido con Nigeria (en Nantes, cuyo campo tiene un aforo de 52.000 localidades); y 3.400 de los encuentros con Paraguay y Bulgaria (en Saint Etienne y Lens, cuyos aforos son de 42.000 espectadores).

España no ha sido el único país en protestar. La Federación inglesa ha dirigido una carta al resto de las federaciones de países finalistas del Mundial en la que califica de "intolerable" el comportamiento de la organización del campeonato. Los dirigentes ingleses critican con dureza que a las federaciones no se les proporcione lo que piden y que, en cambio, según sus noticias, se hayan puesto a la venta paquetes de entradas, denominadas prestige, a precios más elevados de los oficiales y que se ofrecen a empresas o marcas comerciales, principalmente de EE UU. La Federación Española denuncia en su escrito a la FIFA el caso de un ciudadano, del que no indica su nacionalidad, pero sí sus apellidos y número de teléfono móvil que ofrece paquetes de entradas de esa clase a 350 dólares -unas 50.000 pesetas- cada una.

El malestar por la distribución de las entradas entre las federaciones de los equipos Finalistas ha cristalizado en un movimiento de protesta, al que, además de España e Inglaterra, se han unido otros países europeos, como Italia, Alemania y Croacia. La FIFA ha citado a las federaciones de los 32 países finalistas del Mundial a una reunión en París, los próximos días 9 y 10, para tratar este asunto.