Un nuevo fracaso del espionaje israelí provocó la dimisión del jefe del Mosad
El otrora glorioso servicio de espionaje israelí, el Mosad, que todavía sangra por la herida que le causó una fallida misión en Jordania, acaba de fracasar en otra misión secreta en Europa, según informaron ayer diversos medios informativos israelíes. Ese nuevo hecho es lo que al parecer provocó la dimisión, el día anterior, del jefe del Mosad, el general Danny Yatom.
De acuerdo con la televisión israelí, las autoridades de "uno de los países que más simpatizan con Israel en Europa Occidental" han detenido a algunos agentes y ahora Tel Aviv teme que sus relaciones bilaterales resulten perjudicadas. La televisión no mencionó el nombre del país, pero poco después de conocerse la noticia la fiscal federal de Suiza convocó para hoy una conferencia de prensa respecto a un caso de espionaje que fuentes de la seguridad vincularon a Israel.
La prensa israelí señalaba que todos los detalles de la operación son confidenciales porque "la vida de un hombre está en peligro". El diario Yediot Ajaronot sugirió que la nueva misión secreta fue probablemente un factor clave en la decisión de Yatom de renunciar a su puesto esta semana.
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