Atutxa emplaza a Mayor a retirar de inmediato la protección de la policía estatal al PP

El consejero vasco de Interior, Juan María Atutxa, emplazó ayer al Ministerio del Interior para que retire antes de este fin de semana los servicios de contravigilancia que realiza el Cuerpo Nacional de Policía para proteger a los ediles del PP. Atutxa formuló esta dispositivo" en Euskadi. Según Atutxa, el exigencia tras saber por la prensa la versión conflicto "excede" sus competencias, por lo ministerial de la reunión mantenida la noche del miércoles entre ambos responsables de Interior, "de la que se desprende que [Jaime Mayor Oreja] está dispuesto a mantener este dispositivo" en Euskadi. Según Atutxa, el conflicto "excede" sus competencias, por lo que apelará al Gobierno vasco . El propio Mayor Oreja contestó anoche a Atutxa: "El ultimátum no es aceptable, como tampoco lo aceptaría el Gobierno vasco".

Durante la cena que compartieron el pasado jueves, en un restaurante situado a espaldas del Ministerio del Interior en Madrid, Mayor Oreja no ofreció ninguna respuesta a la demanda de Atutxa de que anulase la Operación Filtro, según el consejero de Interior. Sin embargo, éste se mostró "profundamente irritado" al conocer ayer, a través de noticias de prensa, la aparente decisión del ministro de mantener este dispositivo de protección de los cargos electos del PP.La reacción del consejero fue fulminante. En su opinión, "la desactivación de ese sistema puede hacerse en horas, pero esperaré hasta el próximo fin de semana. Si el ministerio no lo desmonta, comunicaré este hecho al Gobierno vasco que, como órgano colegiado, es el que debe de pronunciarse". Atutxa razonó que este conflicto excede de sus competencias, por lo que reclamará la intervención del Ejecutivo vasco en su reunión del próximo martes.

El máximo responsable de la Ertzaintza sostiene que este cuerpo es "la policía natural" de Euskadi y el que tiene las competencías para encargarse de la seguridad y la protección de los cargos del PP. Confiesa que no tendría ningún reparo en requerir la colaboración del Cuerpo Nacional de Policía o de la Guardia Civil si lo considerase oportuno.

"No quiero alimentar debates ni polémicas públicas sobre este asunto, pero me parece reprobable la actitud del ministro del Interior", proclamó ayer tarde Juan María Atutxa. Éste asegura que la Ertzaintza está en condiciones de garantizar la seguridad de los concejales del Partido Popular, siendo "perfectamente conscientes de que el PP está en una situación de alto riesgo" frente a posibles ataques terroristas.

Respuesta de Mayor

El titular de Interior rechazó que Atutxa hubiera planteado ese ultimátum durante la cena que mantuvieron el pasado jueves. "No hubo ultimátum. Hubo una conversación profunda y seria, pero no se planteó en términos de ultimátum", dijo, para agregar que no aceptaría un emplazamiento semejante, "como tampoco lo aceptaría el Gobierno vasco.En una entrevista emitida en TVE, Mayor Oreja dejó entrever poca disposición a retirar el dispositivo del Cuerpo Nacional de Policía en el País Vasco reclamando "sensatez y sentido común" al departamento de Interior vasco y apelando a la "discreción" como ingrediente imprescindible a la hora de afrontar los temas de seguridad frente a los atentados de ETA.

Al ser preguntado sobre si el mantenimiento de los servicios de contravigilancia podría acarrear una crisis entre el PP y sus socios nacionalistas vascos, Mayor estuvo tajante: "La única crisis que me preocupa es la de los concejales del PP en el País Vasco, la única seguridad que me preocupa es la de los concejales del PP en el País Vasco, y el único ultimátum que me preocupa es el que ha dado ETA a los concejales del PP en el País Vasco". "Yo no voy a ser quien abra polémicas estériles a las que siempre termina por poner fin ETA recordándonos el terror", zanjó.

Mayor dejó clara su confianza en la capacidad de la Ertzaintza y aseguró que existe coordinación entre la policía autonómica vasca y las demás fuerzas de seguridad del Estado, aunque es deseable una mayor cooperación "en todos los terrenos".

Por su parte, el director general de la Policía, Juan Cotino, intentó esquivar la polémica suscitada por la operación de contravigilancia que realizan sus agentes. Se limitó a decir que aceptará cualquier fórmula que permita mejorar la coordinación con la Ertzaintza, "pero lo que tenemos que hacer", señaló, les seguir trabajando". Aunque no lo dijo explícitamente, dio a entender que mantendrá la Operación Filtro. Cotino aseguró que la coordinación entre el Cuerpo Nacional de Policía y la Ertzaintza es "eficaz y cada vez mejor". Esto contrasta frontalmente con la opinión de la policía autónoma vasca, que denuncia sin matices que "en los ocho últimos meses ha habido alrededor de 200 incidentes" al confundirse mutuamente agentes de ambos cuerpos por considerarse sospechosos unos y otros mientras patrullaban por las calles.

Desde el Ministerio del Interior se dejó entrever que el conflicto con la Consejería vasca había quedado aparcado y pendiente de resolución a través de una próxima reunión de la Junta de Seguridad. Sin embargo, Atutxa considera que ésta es una especie de cortina de humo porque entiende que la Junta de Seguridad no es un órgano adecuado para este asunto, sino para ratificar o desarrollar acuerdos.

El PNV pidió el miércoles la comparecencia urgente de Mayor Oreja en el Congreso para que dé explicaciones sobre la Operación Filtro montada por la Jefatura Superior de Policía de Bilbao. Begoña Lasagabaster, diputada de Eusko Alkartasuna, se ha sumado a esta solicitud con el deseo, además, de que el ministro aclare si este tipo de actuaciones de las fuerzas de seguridad del Estado se adecúan a las competencias del Estatuto de Gernika.

Tanto desde el Ministerio del Interior como desde la Consejería vasca de Interior se asegura que su deseo es no volver a entrar en agrias disputas que "sólo benefician a ETA". "No queremos volver a tropezar en la misma piedra que cuando se suscitó una polémica a raíz de que el PP abriera una suscripción para pagar los gastos en escoltas privados. Aquella polémica la cerró ETA cuando asesinó al concejal de Sevilla Alberto Jiménez-Becerril y a su esposa", recordaron fuentes del ministerio.