Romà aprovecha un fallo de Peterhansel

, La puerta del Sáhara se abrió ayer a la esperanza de los mejores pilotos españoles del Rally París-Dakar, que aprovecharon un error del número uno de la carrera, el francés Stephane Peterhansel (Yamaha), para volver al primer plano. Después de la quinta etapa, entre Er Rachidia y Ouarzazate (Marruecos), Joan Romá (KTM) se colocó líder de las motos y Jordi Arcarons (KTM) y Oácar Gallardo (BMW) también recuperaron terreno.Peterhansel volvió a ser el protagonista del día. Pero esta vez no pudo dominar y asustar. A quien asume el papel de villano que ejerce siempre respecto a los pilotos españoles le tocó ayer llegar a, la meta con el rabo entre las piernas. En su zurrón, se acumularon 20 minutos de pérdida: el francés extravió el camino en la parte final de la etapa y cedió el botín obtenido en la primera jornada africana.

Romá, Arcarons y Gallardo llegaron a la meta de Ouarzazate, al borde del desierto, y se sorprendieron de no hallar a Peterhansel refrescándose, presumiendo . de su dominio. La de ayer pasaba por ser una etapa propicia para él. Y así ocurrió hasta el último control de paso antes de la meta, pero entonces cometió un error en la orientación y sus enemigos lo agradecieron. Fue un día triunfal para KTM: la marca austríaca ocupó las tres primeras posiciones de la etapa y cinco de sus pilotos pasan a encabezar la carrera. Romá, el no¡ de Folgueroles, de 25 años, que participa: en su tercer Dakar, manda ahora con Im 33s sobre el italiano Fabio Meoni y 9m 09s sobre Arcarons, tercero. Gallardo es sexto a lOm 28s y Peterhansel, octavo, a más de 11 minutos.

La clasificación de coches no ofrece tantas alternativas. Manda.Mitsubishi. Ayer ganó la etapa el japonés Kenjiro Shinozuka, y su compañero Bruno Saby mantuvo el liderato. Se registró el primer abandono español: Álvaro Bultó (Nissan), y se supo que la mejor baza, la de Josep Maria Serviá (Toyota), había perdido toda opción al ceder más de seis horas la víspera por una avería. Hoy se disputa la sexta etapa, entre Ouarzazate y Smara (Marruecos), de 354 kilómetros.