"Mi mala racha ha terminado"
Davor Suker dedica sus dos goles al preparador físico de Madrid
En el minuto 28, Davor Suker atrapó un balón, en el centro del área y lanzó a puerta con su pierna izquierda de volea. La pelota entró. Entonces Suker tomó carrerilla y se marchó hasta el fondo sur. Encaramado en la valla, festejó su gol con los ultras, incondicionales con él en los malos momentos. Luego miró al cielo y suspiró. "Mi mala racha ha terminado", proclamó. Con ese gol, Suker ganó en confianza y más tarde pidió a Fernando Hierro tirar el penalti. En el minuto 72 anotaba de nuevo. "Mis goles son para Angel Vilda, mi preparador físico que tanto me ha ayudado". Suker ha trabajado las últimas semanas con Vilda para mejorar su forma. "Él sabe lo que he pasado estos días y lo que hemos hablado. Por eso hoy me he acordado de él".Jupp Heynckes dice que no tiene dotes adivinatorias, que sus predicciones se cumplen porque él conoce bien a sus jugadores. El técnico estaba convencido de que el Madrid pasaría a los cuartos de final y de que Davor Suker iba a marcar. Heynckes acertó. "Me alegro mucho por Suker Ha merecido la pena tener paciencia que he tenido con él. Lo importante no son sólo los dos goles, sino que se ha movido muy bien durante el encuentro, ha estado muy vivo".
Estos goles tienen para Heynekes un valor adicional porque servirán para reforzar la moral de Suker, que, además de sufrir problemas físicos, padecía una crisis de angustia motivada por sus continuos desaciertos. "Los goles para un delantero son como una droga. Necesitaba marcar para seguir adelante", explicó Suker. El delantero reconoció haber vivido momentos muy difíciles en los últimos días. "Todavía no me explico cómo fallé el gol ante el Celta. Los silbidos del público los entendí, lo que ellos querían era que marcara. Pero yo no soy un jugador débil; si lo fuera, estaría en Croacia".
Suker piensa ya en el futuro, quiere olvidar. "Me gustaría el Bayer Leverkusen o el Mónaco en los cuartos de final". A Heynckes, en cambio, le da lo mismo. "En esa fase todos son buenos. Pero lo importante es que el Madrid ya está entre los ocho mejores equipos de Europa. Estoy muy contento con el equipo. Desde que comenzó el encuentro, hemos puesto mucha voluntad y concentración. Además, marcamos pronto el primer gol y nos sirvió para encarrilar el partido".
Roberto Carlos se enterará del próximo rival del Madrid en esta competición en Riad, adonde viaja mañana para concentrarse con Brasil. "Me voy feliz porque me he despedido con un gol. Me hubiera gustado marcar el de volea, pero lo importante es que en este partido, además de los tres puntos, ha habido detalles de gran calidad". Antes de despedirse, hizo balance. "Éste ha sido un buen año, ganamos la Liga, y el próximo tenemos que seguir mejorando. Mi propósito es ganar el balón de oro; sé que es difícil para un defensa, pero quiero hacer todo lo posible, lo haré trabajando en las cosas que quiero hacer, sin inventar nada. Espero que este partido me haya ayudado algo en mi propósito". Antes de marcharse, Roberto Carlos lanzó un deseo: "Quiero que nos toque la Juventus".
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