Dos cuestiones inoportunas

Jupp Heynckes no quiso ayer hablar de dos cuestiones que, en su opinión, pueden distraer la atención del equipo en un momento tan importante, cuando el Madrid se juega su pase a los cuartos de final. El entrenador no se pronunció sobre las declaraciones que Lorenzo Sanz hizo horas antes a la cadena SER sobre su hijo ni sobre la presentación de Savio. "De esas cuestiones no hablo", dijo.Sanz reabrió en la noche del lunes la situación que vive su hijo Fernando. Advirtió que sus críticas al equipo tras el empate en Oviedo no tenían nada que ver con unas declaraciones en las que Heynckes anunciaba que no contaba con el defensa. Pero el presidente sí hizo ver que se comete una injusticia con su hijo. "Me duele porque no se le han dado las oportunidades que a los demás por ser el hijo del presidente. Se puede pensar que se le está maltratando. Es un jugador que no ha tenido las mismas oportunidades que los demás. El vive como un profesional más, pero tiene el problema que se llama Sanz, si no ya hubiera jugado. Estoy convencido de que si no se llamara Sanz... Cuando se le ha necesitado ha jugado a un buen nivel, y si se le hubiera dado la misma continuidad que a otros podría ser titular perfectamente. No me pierde el ser padre, yo llevo viendo fútbol muchos años".

Heynckes no quiere entrar en la polémica sobre esta cuestión porque en su día ya se pronunció al aconsejar a Fernando Sanz y a García Calvo que se marcharan cedidos para ganar en experiencia. García Calvo escuchó la recomendación.

La llegada de Savio en vísperas del partido ante el Oporto no parece que le haya gustado a Heynckes. El técnico ha alabado el juego del brasileño, pero advierte que, en su opinión, el equipo necesita dos jugadores físicamente fuertes y de corte más defensivo.