Numerosos espías iraníes operan en Bosnia, según fuentes occidentales
El número de espías iraníes no ha dejado de crecer en Bosnia-Herzegovina y su infiltración ha sido progresiva en el programa estadounidense de entrenamiento del Ejército de Sarajevo, según fuentes militares occidentales y bosnias. Estas fuentes aseguran que han identificado a más de 200 agentes iraníes que al parecer han comenzado a introducirse de forma metódica y discreta en los círculos políticos y sociales bosnios con la intención no sólo de captar información sino también de sabotear intereses occidentales en la región.El programa patrocinado por EE UU para entrenar al Ejército bosnio es, según estas fuentes, un objetivo clave, puesto que la creación de un Ejército integrado en el que musulmanes y croatas obedezcan a un mando conjunto es esencial para devolver la estabilidad política al país, y permitir la retirada de las tropas comandadas por la OTAN.
De acuerdo con estas mismas fuentes, los espías iraníes trabajan estrechamente con la facción pro-iraní del servicio de espionaje bosnio. En varias entrevistas, seis miembros de los servicios secretos bosnios, tanto retirados como en activo, han admitido el tira y afloja dentro de la organización sobre el reforzamiento de los lazos con Irán.
"No sé por qué los estadounidenses se comportan de forma tan ingenua", asegura Munir Alibabic, ex jefe de los servicios de espionaje bosnios en Sarajevo. "Deberían darse cuenta de que eso está sucediendo". Alibabic añadió que fue forzado a dimitir el año pasado por oponerse al incremento de la influencia iraní en los servicios secretos del Gobierno bosnio. Otro agente que compartía las opiniones de Alibabic fue asesinado, y un tercero aseguró que fue secuestrado, torturado y dado por muerto por sus propios compañeros.
Un veterano oficial insiste desde Washington en que la red de espionaje iraní no re presenta una amenaza inmediata porque espías norteamericanos siguen de cerca sus pasos. Otro responsable norteamericano subraya que la presencia de agentes iraníes entre los traductores, conductores y personal del programa de entrenamiento militar no implica que puedan obtener grandes cosas.
Sin embargo, responsables del espionaje occidental en Bosnia están bastante más preocupados, porque creen que estos agentes pretenden volver contra Occidente a los líderes musulmanes, tanto políticos como religiosos, de Bosnia.
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