Objetivo: batir a los socialistas

La invitación del presidente del Gobierno, José María Aznar, y de los vicepresidentes Francisco Álvarez Cascos y Rodrigo Rato a Jordi Pujol para pactar el calendario electoral llega acompañada de otra oferta: aunar esfuerzos para batir a los socialistas, principales contrincantes del Partido Popular a nivel nacional y de Pujol en Cataluña.Pese a ese interés en el objetivo común por desgastar al PSOE, fuentes nacionalistas aseguran que Pujol ve con desconfianza esa operación, porque el hundimiento electoral de los socialistas llevaría aparejada la subida del Partido Popular, con el riesgo para CiU de que alcanzara la mayoría absoluta o la mayoría suficiente para gobernar sin contar con los nacionalistas catalanes, que es la preocupación máxima del presidente de la Generalitat.Además, dirigentes de CiU no tan pragmáticos' o tan. discretos como Pujol expresan en privado su esperanza de que el PSOE se recupere y sea posible en el futuro reeditar el pacto del periodo 19931995, aunque se resignan a que el Partido Popular volverá a ganar las próximas elecciones generales.La rivalidad política de CiU con el PSOE y el PP es de distinto calibre. Nacionalistas y socialistas han coincidido, en diversas declaraciones, que Pujol se sentía mejor tratado por el Gobierno del PSOE que por el del PP, aunque lograba menos resultados prácticos con los socialistas para su comunidad.