La alianza Fini-Berlusconi resulta barrida en los comicios italianos

Era una catástrofe anunciada, pero no por ello ha sido menor el impacto de las elecciones locales en la alianza de centro-derecha italiana, el Polo de las Libertades. Cuando las proyecciones iniciales comenzaron a verse confirmadas ayer por el escrutinio, los líderes del Polo comprobaron que el triunfo aplastante de los alcaldes del Olivo iba seguido por el éxito -aunque menos amplio- de la coalición de Gobierno.

Mientras Gianfranco Fini, líder de la Alianza Nacional, aliada de Berlusconi, reconocía ayer "que el Polo había sido vencido políticamente", aumentan los rumores de una inminente reestructuración a fondo del centro.Los datos del Ministerio del Interior confirmaron ayer los buenos resultados de los candidatos del Olivo Francesco Rutelli, Massimo Cacciari y Antonio Bassolino, reelegidos en la primera vuelta alcaldes de Roma, Venecia y Nápoles, con porcentajes del 60%, el 65% y el 73% respectivamente. En los tres casos los alcaldes reelegidos tendrán mayoría en el ayuntamiento, ya que los votos de los partidos que integran la coalición de centroizquierda, más los recibidos por Refundación Comunista, han superado en estas tres capitales el 50% requerido. En Roma, Alianza Nacional ha sido el partido más votado (23%), pero con el Partido Democrático de la Izquierda (PDS, ex comunista) pisándoles los talones (22%).

Los candidatos del Polo, barridos por este nuevo viento de centro progresista, achacaban ayer a la abstención y a los medios de comunicación los malos resultados. El éxito del Olivo no se ha visto empañado ni siquiera por la Liga Norte en las zonas más activas de los padanos. El mantenimiento de la alcaldía de Venecia lo prueba, si bien el líder de la Liga, Urriberto Bossi, se dio por satisfecho ayer con unos resultados que permiten a su partido defender el consejo provincial de Vicenza en una segunda vuelta y las ciudades de Varese y Alessandria.

Portavoces de Alianza Nacional y de los partidos centristas menores del Polo negaron ayer que la coalición necesite urgentemente hallar un nuevo líder. En todo caso, aceptan, es necesario un cambio de estrategia. Sólo algunos personajes notorios, como la ex candidata a alcalde de Nápoles Alessandra Mussolini, se permitían hacer un duro juicio contra Forza Italia y su líder, Silvio Berlusconi, aludiendo a la desastrosa elección de candidatos.

Después de los primeros brindis, los nuevos alcaldes de Roma, Nápoles y Venecia han reanudado su campaña en favor de una mayor descentralización y un mayor federalismo para el Estado italiano.