Semana clave para la oposición argelina

Los partidos de la oposición democrática en Argelia han convocado a una huelga general para el 12 de noviembre y a una marcha pacífica por las calles de la capital al día siguiente en protesta contra los resultados de las pasadas elecciones, que tachan de "fraude masivo". Los principales grupos de la oposición argelina consideran que esta próxima semana será decisiva para "restablecer el orden democrático".

La oposición ha creado un comité permanente de concertación que viene protagonizando las acciones de protesta contra el régimen de Liamín Zerual, acusado de favorecer al partido presidencial, Reagrupación Nacional Democrática (RND), en contra del resto de formaciones políticas, incluido el ex partido único FLN (Frente Nacional de Liberación) y el MSP-Hamas, sus dos aliados en la coalición gubernamental.La semana pasada, la oposición ha protagonizado diversas manifestaciones de contestación reprimidas por las autoridades. La policía disolvió una marcha de los diputados de la oposición, una manifestación de estudiantes y una sentada ante la sede de la Reagrupación por la Cultura y la Democracia (RCD), uno de los convocantes de la huelga.

Los partidos que convocan la huelga, el Frente de Fuerzas Socialistas (FFS), el RCD, el Partido de Trabajadores (extrema izquierda), el Partido de la Renovación Argelina (PRA) y las formaciones islamistas moderadas Hamas y Ennahda, han decidido alzar el tono frente al régimen de Zerual, responsable del pucherazo electoral.

La protesta de la oposición se produce paralelamente a la aparición de indicios de fisuras en el seno del aparato del poder. Los servicios secretos argelinos acaban de ser puestos en entredicho por un presunto tránsfuga cuyas revelaciones publica el semanario londinense The Observer.

Según el ex miembro de la seguridad militar, que firma con el apodo de Yussuf, los servicios secretos son los autores directos de la ola de atentados cometidos en Francia hace dos años y que costaron la vida a ocho personas. Han sido igualmente estos "escuadrones de la muerte" creados por la seguridad militar quienes han fabricado el Grupo Islámico Armado (GIA), responsable de las matanzas cometidas en el país en los últimos tiempos.

Este desertor del espionaje argelino, que dice haber pedido refugio en el Reino Unido, afirma que los espías de su país compran regularmente en, Europa a "policías, periodistas y parlamentarios", y como prueba de ello afirma que él mismo entregó un maletín con medio millón de francos (12 millones de pesetas) a un ex diputado francés.

Las revelaciones de The Observer ponen de relieve las graves grietas que se están produciendo en el seno del poder. La imposibilidad obvia de poder presentar pruebas de tales afirmaciones contrasta con la precisión de las acusaciones, según las cuales el principal responsable de la violencia terrorista que vive el país está en los servicios de seguridad, y en concreto en sus dos principales cabezas, el general Tewfik Medien, patrón del espionaje, y el general Smain Lamari, jefe del contraespionaje y artífice del acuerdo firmado entre los militares y el brazo armado del Frente Islámico de Salvación (FIS), el Ejército Islámico de Salvación, que ha permitido un alto el fuego de esta formación desde el 1 de octubre. Llama la atención que el aparato presidencial quede "libre de toda culpa".