González proclama que los sondeos que dan por vencido a Caballero están amañados

Felipe González acudió anoche a Vigo a pedir el voto para el candidato de la coalición progresista, Abel Caballero, con más vigor que si lo solicitase para sí. González cree en este proyecto de unión de las izquierdas, pero lo ve en peligro por dos causas externas: la pervivencia de la derecha caciquil y la desmovilización que persigue esa misma derecha al encargar sondeos de opinión que dan ya por derrotado a Caballero. González denunció ayer que esas encuestas serán un "desastre" y acusó a sus empresas de amañar esos resultados "por teléfono para hacer entre todas una media y no equivocarse mucho".

González reiteró ayer en el desbordado Pabellón Municipal de As Travesas (5.000 personas) su conocido discurso de preocupación hacia el PP "porque está rompiendo las reglas del juego democrático". En ese contexto cupo de todo, desde innovadoras teorías sobre la reforma laboral o la preocupante ampliación de Europa hacia el Este hasta quejas por cómo aborda el Gobierno de José María Aznar las pensiones, la educación y la sanidad piara favorecer a los más ricos y a los sectores privados que les apoyan. También hubo lamentos ante la presión del Gobierno actual hacia los medios de comunicación y las firmas de sondeos.González presumió de que tras permanecer el PSOE 14 años en el poder no exista en España ninguna televisión, radio o gran periódico de izquierdas y, sin embargo, observa al PP totalmente obsesionado no sólo con su "sindicato del crimen" sino y especialmente con la prensa de derechas independiente.

Ahí situó la reclamación contra el trabajo nada "sociológico ni científico", de las empresas de sondeos de opinión. González llamó "a ganar a las encuestas".

Puso su propio ejemplo, hace un año y medio, cuando a una semana de las generales de marzo de 1996 esas mismas empresas ofrecían una diferencia a favor del PP de entre 10 y 14 puntos. Luego remachó: "Al final, si nos dan una semana más, los llevamos; al hoy".A gusto del cliente

González alertó sobre los métodos de trabajo de esas compañías: "Ahora, las empresas de sondeos, se llaman entre ellas y hacen entre todas la media para no equivocarse mucho o si lo hacen que lo hagan todas igual". Añadió que esos análisis se contratan al gusto del cliente, "como los churros y las porras", y dirigió su, mirada particularmente hacia Manuel Fraga para atribuirle directamente la autoría de esas encuestas que le dan al PP la mayoría absoluta y sitúan a la coalición y al BNG empatados, "para que se peleen entre ellos".

González entiende, además, que lo más grave de esta manipulación es que algunos dirigentes y simpatizantes socialistas "han picado el anzuelo y corremos el peligro de que ustedes se desmovilicen y se queden en casa".

González se refirió varias veces a la polémica y retocada foto electoral de Fraga en los carteles. Aprovechó una alusión irónica a su rejuvenecimiento, "pese a que hizo la mil¡ con lanza", para subrayar que él ha sido el único presidente. de la democracia que ha hecho la mili sin "escaquearse". También bromeó con que Fraga eluda el debate televisivo con Caballero "porque no quiere que le acerquen mucho la cámara, como Carmen Sevilla".

Aquí González quiso hablar de dos asuntos recurrentes en sus últimos discursos: los nacionalistas y el acoso del PP a los medios de comunicación. Sobre los primeros volvió a recordar su teoría de que "los socialistas les entendemos y apreciamos mejor pero les damos menos, y tienen razón".

En su exposición final sobre el peligro que se cierne sobre las reglas y el reglamento del juego democrático, González introdujo una apelación a CiU y a Jordi Pujol para que ya no pongan la excusa de que se sacrifican al apoyar los presupuestos de Aznar para entrar en el euro. González remachó que ya se está en el euro y advirtió, sobre la ruptura de las formas democráticas, que "el electorado de CiU no lo entiende muy bien y está inquieto".

Sobre el ataque del Ejecutivo de Aznar a los medios de comunicación y en especial al Grupo PRISA, González recordó su afán "insaciable" por hacerse con la Cope pese a que no le hace falta y con Onda Cero. En el caso de la "cadena de los ciegos", González indicó que el Ejecutivo está "utilizando el cuponazo para ponerlos en fila india, por el carril que les marcan".