Un regalo para el presidente

El Real Madrid llegó ayer a Oporto con la intención de encauzar su clasificación para la segunda fase de la Liga de Campeones. Para ello confía en sumar los tres puntos de la victoria, aunque arañar uno no sería considerado un mal resultado. Euforia no le falta al equipo madridista. Su buena racha en la Liga española y el triunfo en el partido con el que abrió el torneo europeo frente al Rosenborg hacen abrigar suficientes esperanzas. Su principal obstáculo será encontrarse un campeón como el portugués herido después de estrenar la competición con una derrota ante el Olympiakos griego en Atenas. El Oporto necesita los puntos para no arruinar su camino en la Liga de Campeones.El Madrid se ha presentado en Oporto con 22 jugadores. "Todos los disponibles", fue la explicación de Manuel Fernández Trigo, gerente del club, y a hora también presidente en funciones al encontrarse la entidad inmersa en un periodo electoral. A la cita portuguesa sólo faltan cuatro jugadores de la plantilla: el portero alemán Illgner, que con el de mañana cumplirá su sanción de dos partidos, así como Chendo, Alvaro y Petkovic. "Hay que hacer equipo", fue la explicación de Jupp Heynckes, el técnico alemán del conjunto madridista. El entrenador tenía previsto realizar hoy dos entrenamientos, uno por la mañana y otro por la tarde. Pero ya antes de tomar ayer el avión en el aeropuerto de Barajas, el técnico había decidido suspender el trabajo de la mañana. "Son cuestiones técnicas", explicaron fuentes del club. Al Real Madrid le espera un otoño caliente, con partidos miércoles y domingos prácticamente durante 60 días.

El centrocampista Fernando Redondo, por otro lado, fue el foco de atención. Puede ser la principal novedad del Madrid en su partido de mañana ante el Oporto. El propio jugador aseguró en tierras portuguesas que está preparado para saltar como titular al terreno de juego. "El técnico no me ha comunicado si jugaré o no en la formación inicial", aclaró el jugador hispano-argentino. Todas las cartas para perder la titularidad recaen en el brasileño Ze Roberto. El antecedente que apoya el cambio fue el último partido de Liga en Valencia (0-2), donde el brasileño fue sustituido en la segunda parte por Redondo. Todo dependerá del sistema de juego por el que se decida Heynckes ante el Oporto. Si prefiere la contención puede echar mano de Redondo y Sanchis para ese oficio.

El triunfo con que el Madrid 'arrancó en la Liga de Campeones (4-1 ante el Rosenborg noruego) hace abrigar esperanzas a su entrenador para que se mantenga la buena racha que atraviesa el equipo. Pero también reconoce que el Oporto, un equipo más experimentado, y en su campo, no dará las facilidades que dio el campeón noruego. "Nuestro objetivo es alcanzar Ia primera plaza del grupo", señaló el técnico madridista. "El triunfo en Valencia, el pasado sábado, fue el mejor empujón que podíamos recibir ante el encuentro de mañana", aseguró Heynckes.

La plantilla madridista, además, quiere hacerle un buen regalo a Lorenzo Sanz cuando, pasado el periodo electoral, se reincorpore a la presidencia del club. Lorenzo Sanz quiere recibir ese regalo en' directo, y por eso mañana viajará a Oporto para asistir al partido como un aficionado más.