Ibarra: "Joaquín, no debe haber dudas de mi apoyo incondicional"

Todo fue armonía ayer en el Congreso de los socialistas extremeños, donde el secretario regional, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, hizo profesión de lealtad hacia el nuevo líder del PSOE, Joaquín Almunia. Ambos, bendecidos por el ex secretario general Felipe González. Como remate a la clausura del 7º Congreso del PSOE extremeño acudirá hoy el ex vicesecretario general Alfonso Guerra. "Frente a quien piense que puedo patrocinar o encabezar alguna corriente, tengo que decir que estoy aquí para unir al partido, que no me veo dividiendo a los socialistas y sí me veo apoyando a Joaquín Almunia y a toda la ejecutiva federal; Joaquín, no debe haber dudas de mi apoyo incondicional". Con esta declaración Rodríguez Ibarra quiso zanjar cualquier especulación sobre hipotéticas disidencias.Todo esto, no obstante, ya lo habían hablado Almunia y Rodríguez Ibarra la semana pasada en una reunión de la que no quisieron dar publicidad.

Con bastante naturalidad, los delegados dispensaron larguísimos aplausos a Almunia, y junto a eso abrazaron, besaron y pidieron autógrafos a Felipe González. El propio Almunia citaba una y otra vez en su discurso la labor de González en su etapa de Gobierno. Rodríguez Ibarra, por su parte, salpicó su parlamento de referencias a uno y a otro.

Pero Ibarra, además de hablar de asuntos propios de su región, quería hablar de España y del Gobierno. "Quiero pedirle a mi amigo Jordi Pujol que no se sacrifique más por España y que deje de defender a Aznar, que representa a un Gobierno que re corta las libertades", dijo Rodríguez Ibarra. El presidente extremeño recordó que Jordi Pujol "dice todo el rato que no le gusta Aznar, ni sus modos, ni sus actitudes, pero que le apoya porque hay que conseguir que España entre en la moneda única". Como Ibarra da ya por seguro que España entrará en el euro, es por lo que pide ahora a Pujol "que no se siga sacrificando rnás" y que deje de apoyar al Gobierno del Partido Popular.