"Madrid, en el fondo, es una ciudad muy andaluza"
Lleva desde 1955 en El Puerto de Santa María, pegado al carné y al alma. El autor de Pensión Triana ha presentado en Madrid su quinto y último disco, Contrabando, selección de 12 joyas de sentimiento y sonidos hechas canción. Grabado en Punta Paloma, como los discos de Kiko Veneno y Rosario, junto a músicos gaditanos y cubanos, Ruibal define este disco, con poemas de Lorca, músicas magrebíes, orientales, suramericanas y andaluzas, como "analógico y sentimental". Después de 15 años buscando sonidos ancestrales, músicas imposibles y contando emociones, el reconocimiento de Javier Ruibal parece inevitable.Pregunta. ¿De qué es usted contrabandista?
Respuesta. De pasiones, sentimientos y músicas. Cádiz es tierra de fronteras y debe notarse que por ella cruzan las músicas de un lado a otro sin declarar en las aduanas.
P. ¿Por qué sigue siendo inevitable presentar sus trabajos en Madrid?
R. Creo que cualquier artista que tenga que poner en el escaparate lo que tiene debe hacerlo en Madrid. Aquí están la industria y el público. Después volveré a mi ciudad, para vestirlo de largo. Además, la última calle de Córdoba o Granada empieza en la calle de Atocha. Madrid, en el fondo, es una ciudad muy andaluza que a mí, y ya son muchos años, siempre me ha tratado de maravilla.
P. Amancio Prada lo llamó emboscado"...
R. Mi intención no ha sido echarme al monte, pero como no he hecho nunca una estrategia al margen de la música, y as músicas que busco no gozan de la prebenda del escaparate, acabas de emboscado. Pero ahora, con tanta sobresaturación de música de plástico, vuelve la canción como valor.P. Este año varios músicos andaluces (Morente, Kiko Veneno, Vicente Amigo, Martirio, Chano Domínguez, Raimundo ... ) han sacado discos redondos o muy buenos. ¿Después de mucho sufrir, les ha llegado la hora?
R. Ha citado a gente que llevamos buscando desde el principio la piedra filosofal. Lo que pasa, y hay que agradecérselo al público, es que, entre tantas dificultades, hay gente que empieza a buscarnos a los alquimistas.
P. ¿Cómo prefiere ser considerado, como cantautor, cantante o poeta en melodía?
R. Preferiría que me escucharan en vez de bautizarme. Las etiquetas nunca son definitorias.
P. Hace años, Luis Eduardo Aute cantó en Al alba contra el fusilamiento franquista de varios presos etarras. ¿Haría usted ahora una canción sobre el asesinato del concejal del PP en Ermua, Miguel Angel Blanco?
R. La mejor canción contra ETA es salir a la calle de tu pueblo y mostrar tu repulsa. Y ya la hemos cantado maravillosamente un orfeón de 40 millones de personas.
Contrabando, de Javier Ruibal. Discos PDI, 1997.
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