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Cantatore:"Volver es imposible"

Medio millar de aficionados vitorearon al ex técnico del Valladolid en su casa

Vicente Cantatore rompió ayer su silencio tras su destitución como entrenador del Real Valladolid. Cantatore está molesto tanto por el fondo como por las formas: "Yo he entregado lo máximo de mí mismo, y lo que ha ocurrido jamás lo hubiese esperado. Me encuentro ahora de la única manera en que se puede estar después de lo que ha ocurrido, amargado, pero con alegría porque el equipo ganó el partido de Copa de la UEFA", aseguró el técnico chileno, que no ha vuelto a conversar con ningún miembro de la directiva, pese a que le han llamado más de 10 veces, según asegura el propio Cantatore. Sin embargo, no quiere oír hablar de una posible marcha atrás: "La decisión ya está tomada y sobre este tema no quiero decir nada. No hay vuelta de hoja, pero no por mí, sino por lo que los directivos han dicho y por su modo de actuar. Es una solución que han tomado ellos y no hay más que hablar".Con quien sí ha conversado Vicente Cantatore ha sido con el presidente del club, Marcos Fernández, que se encuentra en Estados Unidos recuperándose de una grave enfermedad. En la ciudad se piensa que lo ocurrido no se habría producido si el presidente siguiese al frente del club, y el propio Cantatore corrobora esa opinión. Según Cantatore, "la relación con el presidente puedo asegurar que siempre fue excelente y con él en el club, esto no hubiese ocurrido. Yo hablé con él el miércoles por la mañana, pero es una conversación de la que, por respeto, no quiero hablar. El me pidió que si había posibilidad intentase retomar pero eso es imposible. Lo que sí aseguro es que cuando él vuelva, y espero que sea muy pronto, yo estaré a su completa disposición".

Cantatore vio cómo el martes por la noche cerca de 500 aficionados rodeaban su domicilio en un barrio residencial de Valladolid, con gritos de apoyo hacia su persona y en contra de la directiva. Según Cantatore, "es algo que jamás hubiese esperado, pero a lo que estoy tremendamente agradecido, porque uno no se lo puede ni imaginar. Desde mi casa oía el ambiente y los gritos que había en el estadio pero estaba más pendiente del partido. Luego fue toda una sorpresa ver a tanta gente en mi casa". Cantatore se vio obligado a salir al balcón para saludar a los aficionados.

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