Valentino cambia de etiqueta

Valentino, la quinta firma de moda italiana en términos de facturación, tendrá en breve nuevo dueño. Fuentes del Holding de Participación Industrial (HPI), la empresa surgida de la escisión de Gemina, con intereses en el mundo editorial (propietario de Rizzoli, principal accionista del diario español El Mundo) y en la industria textil italiana, confirmaron ayer desde Milán haber dado los primeros pasos para la adquisición del grupo Valentino, con sede en Luxemburgo.La carta de intenciones firmada por HPI subraya, con la particular retórica que rige los negocios en Italia, que "se están profundizando los contactos preliminares con vistas a una eventual conclusión del acuerdo". Dicho acuerdo de absorción se completará con la adquisición por parte de los socios del grupo Valentino de un pequeño porcentaje en el capital de HPI. El grupo resultante tendrá un valor de mercado de 7,5 billones de liras (unos 645.000 millones de pesetas).

El grupo Valentino Garavani, cuyos datos financieros se guardan celosamente en la sede luxemburguesa establecida e n 1991, no cotiza en Bolsa; pero a raíz de la reestructuración encomendada por el estilista a la firma Goldinan Sachs el año pasado, ha sido valorado en 400 millones de dólares. El grupo es una empresa de corte "famiflar" propiedad en un 65% del propio diseñador, Valentino Garavani, de 65 años de edad, y del administrador de la compañía, Giancarlo Giammetti, de 60, que posee el 35% restante.

El acuerdo de compra de HPI resolvería el futuro de una firma saneada -según datos propios, Valentino, facturó el año pasado por valor de 1,4 billones de liras- que debido a la situación personal de sus dueños -ninguno de los dos tiene herederos-, podría encontrarse en dificultades en el cada vez más competitivo mundo de la moda.

Valentino, formado en la escuela parisina de los años cincuenta, impuso su estilo algo recargado entre las damas maduras de la alta sociedad europea y norteamericana, sin renunciar por ello a un sector más juvenil. El modisto ha vestido a Jacqueline Onassis, Sofía Loren, la fallecida Diana de Gales y hasta la explosiva estrella Sharon Stone. Como en el caso de Versace, la firma Valentino se cotiza extraordinariamente en Japón. HPI, dirigida por Maurizio Romiti, es propietaria de la empresa textil GFT cuya relación con Valentino se remonta a 1979. La GFT produce bajo licencia algunas líneas de pret-à-porter del estilista, conocido como "el divino".