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Malasia insta al resto del sureste asiático a luchar contra los especuladores extranjeros

Las medidas intervencionistas aprobadas por Malasia para plantar cara a los especuladores están incrementando y no frenando los ataques a su moneda y depri miendo su mercado de valores. Ayer, el ringgit -su divisa- y la Bolsa de Kuala Lumpur cayeron en picado. Las monedas de Filipinas y de Tailandia se depreciaron también a mínimos históricos. El Gobierno malaisio anunció ayer que los países del sureste asiático van a luchar de forma concertada contra la guerra que los especuladores extranjeros han declarado a las monedas de la región.

El viceprimer ministro malaisio, Anwar Ibrahim, advirtió que el Gobierno aún dispone de altos recursos para hacer frente a los grupo financieros occidentales que están atacando los mercados de valores y las monedas de la región. Ibrahim, que es también responsable de la cartera de Finanzas, añadió que Malaisia no teme a estos grupos de especuladores -fue George Soros el que menciono a principios de verano que el mercado del sureste asiático estaba sobrevalorado y que lo lógico era una corrección- y que no duda de que las medidas adoptadas por el Gobierno hará que los asaltantes "se retuerzan bajo un sol abarasador". "Estamos convencidos de que los especuladores acabarán teniendo unas pérdidas colosales si continúan vendiendo nuestras acciones".El ringgit, la moneda malaisia, cayó por debajo de la barrera psicológica de los 3.000 ringgit por dólar, en un entorno de pánico desinversor en la Bolsa de Kuala Lumpur.

De nada ha servido el anuncio que hizo el día anterior el primer ministro, Mohamad Mahathir, sobre la dotación de 20.600 millones de dólares (3,18 billones de pesetas) a un fondo público para comprar título en la Bolsa y frenar su caída. La Bolsa de Kuala Lumpur volvió a bajar por décimo día consecutivo. En un momento de la sesión llegó a perder casi un 10% aunque al cierre retrocedió un 2,62%.

La especulación, que se concentró en el ringgit, acabó perjudicando al resto de las divisas de la zona, especialemnte al peso filipino y el baht tailandés. El primero cotizó a 32,41 pesos por dólar frente a 31,70 del miércoles. El segundo bajó hasta 38,30 balits por dólar frente a 35,50.

En Indonesia, al contrario, el plan de austeridad anunciado por el Gobierno parece haber dado confianza a los inversores. Ayer la rupia aguantó los ataques. Se fortaleció ligeramente hasta cotizar a 3.025 rupias por dólar frente a un cierre en Tokio el día anterior de 3.027,5. La bolsa ganó un 4,2%, lo que permite elevar al 12% la ganancia obtenida en los dos últimos días.

Indonesia baja tipos

El Gobierno de Yakarta se permitió incluso una pequeña rebaja de los tipos de interés a corto plazo. Tras subirlos al 30% y el 28% en los plazos a un día y 3 meses, respectivamente, los bajó ayer al 27% y el 25%. Los analistas esperan que a medida que se vayan concretando las medidas, el Gobierno siga flexibilizando su política monetaria para evitar un frenazo brusco del crecimiento económico y la quiebra financiera de las compañías.

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