_
_
_
_

Buenos detalles de Madrid ante al Ajax

El equipo de Heynckes gana un partido abierto frente a un excelente rival

A falta de tarta europea que jugarse, sin puntos cruciales ni muerte súbita en la mirilla del rifle, Real Madrid y Ajax podían disputar un partido de clase a clase, un partido de prácticas para la batalla europea que se les avecina. Ayer fue el choque de la falta de presión, un partido sin especulaciones ante el resultado pero con dignidades y memoria en juego.El Madrid saltó al campo con el problema de su central convertido en asunto que comienza a ser demasiado incordiante. La mala fortuna y la condición de profeta en su tierra de Fernando Hierro acabó con el jugador de Málaga herido tras una avalancha de simpatía paisana a la entrada del hotel. El parte: doce puntos de sutura en la pierna izquierda. Pero a Hierro no le sustituyeron ni García Calvo ni Fernando Sanz que deben contar ya las afrentas de sus entrenadores como cosa cotidiana. Ante situaciones semejantes, Chendo siempre es el tercer hombre. El técnico alemán le lanzaba así un doble mensaje a su presidente: la necesidad perentoria de un central experimentado y la confirmación de que por amistoso o intrascendente que sea un partido no será él quien permita un descuido por bisoñez.

Más información
Hierro cae lesionado por los hinchas

En todo caso holandeses y españoles decideron plantear un partido de reafirmación de vitrinas. Y en el país del riesgo los del Ajax, jugando con una defensa adelantadísma y con un sistema donde cualquier jugador puede transformarse en interior o delantero, se llevan la palma. Ayer no fue una apisonadora, pero demostró que. es capaz de ganar a cualquiera jugando bien al fútbol.

La revolución esperada de Heynckes para hacerse con Europa en cualquier caso cuenta con la ayuda inestimable de la disciplina instruida por Capello. Quien no esté un día todo lo inspirado que su clase le permita puede siempre recordar las órdenes del sargento italiano.

Esa confianza se transmite también a los superclases: Mijatovic está convencido que este año puede ser el suyo y que para piscinas no hay otro mejor que Suker en la plantilla. Así el croata se inventó en la última recta del primer tiempo del partido uno de esos penaltis capaces de engañar hasta a la moviola. Otro de los atractivos del choque radicaba en el regreso de Michael Laudrup, esta, vez con la camiseta del Ajax. A Laudrup no puede medírsele por su capacidad de trabajo sino por su concepción estética de este deporte. Anoche lo siguió demostrando.

Si ayer no hubiesen estado IlIgner y Van Der Sar entre los palos hubiesen caído más goles: ambos equipos crearon ocasiones como para acabar empatados a cuatro. El Ajax demostró que posee jugadores para volverse a encaramar a lo más alto en cuanto le dejen dos temporadas por delante. Pero el Madrid de Heynckes ya promete un valor añadido sobre el de Capello: ninguno de los jugadores que vistan su camiseta se sentirán de relleno. Sin Roberto Carlos, Alkorta, Hierro o Redondo es un equipo solidísimo. Desde Jaime hasta Canabal, que salió en el segundo tiempo. El resultado fue lo de menos, salvo para el Madrid que puede alegar que ganó a un equipo de superclases, jugando con menos tiempo de preparación que su adversario y jugando algunos excelentes momentos en el segundo tiempo.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_