600.000 mecheros expIosivos y y 14.000 navajas automáticas

A las 14.00 del miércoles, dos agentes de la Policía Municipal de Madrid se dirigieron para ejecutar una inspección de rutina en Mercamadrid. El objetivo elegido era, esta vez, la nave C-8, del centro de transportes. Entraron con la libreta abierta y dispuestos a sancionar cualquier incumplimiento en las condiciones de seguridad e higiene del local.Pero en el interior les aguardaba un material explosivo: 170.000 mecheros. Esta fue la primera sorpresa. La segunda fue aún más cortante: junto a los encendedores descubrieron 14.490 navajas automáticas (un arma prohibida cuya posesión puede implicar una sanción gubernativa de hasta 200.000 pesetas).

Ambos cargamentos, según la Policía Municipal, estaban preparados para ser distribuidos por los bazares de Madrid. El supuesto dueño del local, Zhao T., de 34 años, fue detenido esa misma mañana.

Los agentes, con todo, encontraron algo más que apuntar en su libreta. Se trataba de la dirección de un bazar oriental, ubicado en el número 326 de la Vía Carpetana. Y allí se dirigieron. Dentro del local, apilados en apenas 100 metros cuadrados, descubrieron 443.000 mecheros más.

Este material inflamable estaba amontanado de forma "peligrosa", sin medidas de seguridad y sin apenas espacio para que una persona pudiese pasar.

Un riesgo que se acrecentaba por el hecho de que justo encima del establecimiento viven tres familias.