_
_
_
_
_
TOUR DE FRANCIA 97

Ullrich: "No ha cambiado nada en el equipo"

Carlos Arribas

Walter Godefroot habla en flamenco, y aunque no se le, entiende nada se le ve enfadado. No debería: su equipo ha hecho una exhibición en los Pirineos, pero quizás tema el problema que se le avecina: UlIrich, el príncipe, está, por delante de Riis, el rey. Y, además, ha demostrado estar más fuerte. "Después de la etapa", dijo luego Godefroot en francés, "tengo que decir que Riis está menos fuerte que el año pasado, pero no sé por qué, y mientras no lo sepa, nada cambia dentro del equipo"."Hay que aplaudir a UlIrich más por lo que no ha tirado que por lo mucho que ha tirado",, dice Echávarri. "El no atacar le ha convertido en un gran compañero de equipo".

Tanto las últimas rampas del Tourmalet como en la de Azet, el joven prodigio alemán se ha mantenido el primero del grupo, cara al viento, sin abrir la boca. Cuando el exagerado Virenque se desmelenaba para atacar, Ullrich sin levantarse del sillín apenas, sin esfuerzo, se ponía a su rueda y lo neutralizaba. La máscara -¿recuerdan a Induráin?- nunca se le cayó de la cara. Detrás, boqueando, exigiendo aire a gritos, bastantes metros más tarde, llegaba Riis, Ullrich es lacónico y no dice nada, ni siquiera en alemán. "La etapa nos ha ido muy bien", explica, "porque hemos ganado tiempo sobre los demás en la general"_Hombre de equipo el máximo favorito para ganar el Tour: habla en plural. "Virenque atacó y atacó y yo me fui con él porque era un hombre peligroso para la general. Sabía que Riis llegaría a enlazar siempre. Pero Virenque volvió a intentarlo y ya no pudo más".

Más información
Olano: "Me pasé el día persiguiendo"

Sus palabras fueron otra demostración de que sigue considerando que su, misión es ayudar a Riis a ganar su segundo Tour, "No ha cambiado nada en las relaciones dentro del equipo: cada uno sigue en su puesto".

Riis, sin decepción

"No estoy decepcionado, el Telekom tiene la carrera bajo con trol". De la misma opinión es, cómo no, el propio Riis. El gran danés confesó su mal día, pero, evidentemente, no lo consideró una prueba de declive. "He tenido problemas", dice, "pero es normal que me pase eso en el primer día de montaña. Pero dentro del equipo no cambia nada: Ullrich ha tenido un día muy bueno y yo uno no perfecto". El tono de disculpa del danés ganador del último Tour contrasta con su seguridad del año pasado. "Sufrí mucho en la última subida, pero sé que tengo que sufrir todos los días ya que no soy un escalador. Además, ya sabía que el del Tourmalet sería el peor día de montaña de todo el Tour. Pero el Tour es muy largo y sólo hemos pasado un día duro. Queda mucho hasta París".Y llega la pregunta que todo el mundo se hace: ¿Habrá problemas con Ullrich? ¿qué pasará de aquí en adelante? "¿Problemas?, ninguno", dice. "Yo no pude seguir a Virenque y le tuve que dejar irse, pero por supuesto que Ullrich tenía que seguir su rueda. Y lo hizo muy bien".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Carlos Arribas
Periodista de EL PAÍS desde 1990. Cubre regularmente los Juegos Olímpicos, las principales competiciones de ciclismo y atletismo y las noticias de dopaje.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_