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¡Hasta pronto, Wyoming!

'Caiga quien caiga' baja el telon hasta septiembre y se despide con los momentos estelares

Provocativo, irreverente, surrealista, deslenguado, descarado o ácrata. Estos adjetivos son sólo una pequeña muestra de los que ha merecido Caiga quien caiga (CQC), la baza de Tele 5 para la sobremesa de los domingos. Esta tarde, el informativo que lidera José Miguel Monzón, El Gran Wyoming, perfectamente secundado por su equipo de intrépidos reporteros, baja el telón próximo otoño. Hoy, CQC durará una hora y media, y en él se compaginarán la actualidad de la semana con algunos reportajes que recordarán los mejores momentos. "El programa volverá casi con absoluta certeza el domingo 14 de septiembre y a la misma hora [15.10]. CQC tiene contrato con Tele 5 hasta diciembre. Después no se sabe lo que sucederá", explica Montserrat Fernández Villa, la directora y única mujer del equipo. En la nueva temporada se mantendrá la atrevida fórmula y el mismo es píritu jocoso, pero se cambiarán la cabecera del programa, las ráfagas musicales y el papel de los reporteros. Fernández Villa tampoco descarta la posibilidad de incorporar otros personajes.

El viernes pasado se grabó el último programa. En el plató, a pesar del aparente caos, todo está perfectamente organizado. "¡Simón, deja de zampar y vuelve a tu sitio, que ya se han arreglado los problemas de sonido!", le espeta El Gran Wyoming al guitarrista pelirrojo. Ángel Muñoz, El Reverendo, compositor, arreglista, autor de música de películas e inseparable compañero de Wyoming desde los tiempos que formaron el grupo Paracelso, permanece silen cioso junto a los teclados. Ninguno de los presentes (técnicos, periodistas, curiosos, dos o tres jóvenes Spices en busca de autógrafo) pueden intuir que, poco antes de terminar la grabación, El Reverendo va a sufrir un des mayo. "Distinguido público, vamos a empezar a trabajar, que aquí no venimos sólo de cachondeo. Nos vamos de vacaciones, merecidas, y también nuestros amiguitos los diputados", exclama El Gran Wyorning. "Sí,ya tienes cara de operación salida", le interrumpe Juanjo de la Iglesia. Tonino, el reportero autista, está triste. "Pero, alma de cántaro. si las vacaciones pasan pronto y volveremos a jugar todos juntos", le anima su compañero Javier Martín durante un ensayo.

Caiga quien caiga ha sido la gran sorpresa de la temporada en Tele 5, hasta el punto que se ha convertido en todo un fenómeno televisivo. Después de vagar por la programación como alma en pena, en cuanto empezó a emitir e los domingos a las 15.10 experimentó un ascenso meteórico. Con un tratamiento muy poco ortodoxo de la actualidad y una ágil estética visual, el programa, que arrancó tímidamente, ha alcanzado una media de cuota de pantalla del 21,7% (2.419.000 de espectadores).

De librar altercados con los escoltas y guardaespaldas y negarles la entrada a los actos políticos y sociales han pasado a ser pieza fundamental de esos eventos. Políticos, intelectuales y artistas se declaran ahora incondicionales del programa. No en vano los reporteros de CQC animan más que una vedette los aburridos actos oficiales. Felipe González, por ejemplo, dice que Caiga quíen caiga es "cachondo y provocador", y Leguina afirma que "hasta que no sales en este espacio no vales nada".

Llegar hasta aquí no ha sido fácil, aunque Wyoming asegure que CQC "es el mejor programa audiovisual de la historia del hombre". Para Juanjo de la Iglesia, el apoyo de la prensa ha sido fundamental. "No hemos recibimos críticas malas. Sólo un señor que no había visto el programa en su vida comentó en el suplemento religioso de un periódico nacional que hacíamos mofa y befa del Papa. Parecía que nos habíamos dedicado a repartir jamones por las redacciones", bromea. "Las televisiones no son instituciones benéficas. En este caso, Tele 5 y la productora Globo Media hicieron un ejercicio de paciencia, pero también debieron pensar que algo tenía el agua cuando tanto la bendecían", recalca.

El viernes, a las 23.45, la grabación casi no había sufrido interrupciones. Wyoming continúa vociferando. "Hoy, las estrellas de fútbol desvelarán sus secretos; hablaremos con Esperanza Aguirre de la televisión digital y nos enfrentaremos a los diputados y les recriminaremos la duración de sus vacaciones estivales". Poco después, y como fin de fiesta, los siete miembros del equipo empiezan a cantar La plaga: "Ahí viene la plaga. Me gusta bailar, y cuando está rockanrroleando... es la reina del lugar", entona con un potente vozarrón Pablo Carbonell, ex cantante de Los Toreros Muertos. De pronto, en medio del jolgorio, El Reverendo cae al suelo. Minutos más tarde, una ambulancia le lleva al hospital más próximo. "Estamos muy conmocionados por el accidente. El Reverendo llevaba unos días enfermo con un problema de oído que puede terminar en una perforación de tímpano", explica la directora, quien reconoce que todos están al borde de sus fuerzas.

En septiembre regresarán El Gran Wyoming, Sergio Pazos, Pablo Carbonell, Juanjo de la Iglesia, Marlo Caballero, Tonino Guitián y Javier Martín impecablemente vestidos, con sus gafas negras y, sobre todo, con la lección muy bien aprendida.

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