Juicio contra tres "falsos subasteros" acusados de estafar 63 millones

Tres personas a las que el fiscal acusa de estafar 63 millones a una decena de personas (a quienes prometieron conseguir un piso barato en las subastas judiciales) se sentaron ayer en el banquillo de la Audiencia de Madrid. Se enfrentan, por delitos de estafa y falsedad, a una petición provisional de 12 años de cárcel cada uno.Antonio G. A., Pablo S. H. y Porfirio A. M., los tres acusados, no forman parte del grupo de personas que suelen acaparar los pisos baratos que subastan los jueces de la plaza de Castilla. Los encausados, según el fiscal, "simulaban" conocer los entresijos de las pujas y, a cambio de dinero, se comprometían a conseguir una vivienda barata a sus clientes. Al final, según el fiscal y los abogados de la acusación, se quedaron con el dinero de una decena de clientes, y éstos, sin los prometidos pisos. Todas las operaciones las canalizaron a través de la empresa GMS, Financiación e Inversiones. Una pareja que estaba a punto de casarse perdió, por ejemplo, los nueve millones de pesetas que entregó a cambio de un céntrico piso que le iban a conseguir en una supuesta subasta judicial. A otra persona le estafaron, presuntamente, otros 23 millones por otra vivienda, que tampoco consiguió, en la calle de Arturo Soria. Los acusados falsificaron escritos judiciales para hacer creer a sus víctimas que las operaciones marchaban bien.

Los acusados negaron ayer las imputaciones y dejaron entrever que todo se reducía a un problema económico de una empresa. Sus abogados indicaron que las firmas que figuran en esos falsos escritos no pertenecen a sus clientes, y matizaron que la devolución del dinero se frustró al ingresar aquéllos en la cárcel.