Dos gallegos con el corazón dividido

Un dirigente del socialismo gallego también recibirá la oferta más o menos formal del actual secretario de Organización, Cipriá Ciscar, para ocupar una silla en la futura ejecutiva que saldrá del próximo XXXIV Congreso Federal del PSOE. Y aquí empieza otro pequeño drama personal.Tanto el secretario general de los socialistas gallegos, Francisco Vázquez, alcalde de A Coruña, como el candidato a presidir la Xunta de Galicia, el ex ministro Abel Caballero, sienten un profundo respeto y afecto por Alfonso Guerra. Ninguno de los dos querría, tampoco, dar un portazo a la ejecutiva que dirigirá Felipe González.

Y para complicar las cosas, tanto Abel Caballero como Francisco Vázquez quieren evitar por todos los medios aparecer públicamente en una trifulca interna a pocos meses de las elecciones gallegas cuando, habían conseguido, teóricamente, la tan anhelada como difícil paz interna entre los socialistas de esta comunidad.

Caballero, ayer mismo, en declaraciones a la Cadena SER, se pronunció por la continuidad de Guerra en la próxima ejecutiva. Abogó por una dirección "en la que esté todo el mundo" y añadió que Guerra "tiene un importante papel que desempeñar" y un enorme peso político. El dirigente gallego entiende que lo importante en este congreso "es que todo el mundo encuentre el papel que debe desempeñar", y afirmó que Felipe González no es el culpable de este debate porque "nadie le ha escuchado decir que no quiere que Guerra esté en la dirección".